Cada vez hay más personas concienciadas de que los recursos que consumimos son limitados. Este discurso lo escuchamos constantemente cuando hablamos del segmento de la energía, pero lo cierto es que se puede aplicar a muchos otros planos. Uno de los más importantes es el del consumo alimenticio, donde cada vez más usuarios se conciencian de evitar el desperdicio utilizando alguna de las apps que te vamos a contar ahora.
Toneladas y toneladas de comida se desperdician cada año después de que los restaurantes o incluso los comercios no puedan vender algunos de sus productos. Esto es un problema para las dos partes, pero para el planeta es un grave problema. Por eso de que se están desperdiciando materia prima que podría ser consumida de alguna manera.
Comida más barata para evitar el desperdicio
Cada vez más comercios se conciencian de la necesidad de vender todos sus productos de cualquier forma. Esto implica que todos pueden poner de su parte vendiendo sus productos a un precio más bajo por motivos de calidad, entendiendo por esta el hecho de que un producto esté próximo a su fecha de caducidad y por este motivo debe ser consumido cuanto antes. Puede que no mantenga la misma frescura que en los proyectos colocados en un mostrador en el mismo día, pero hasta que caduquen todavía hay tiempo de ser consumidos.
Lo mismo también se puede aplicar a los restaurantes, donde la cocina de aprovechamiento es uno de los pilares fundamentales de la cocina actual. Y esto se aplica a todo tipo de servicios, tanto a restaurantes y de gran reconocimiento, hasta las cadenas de franquicias de comida rápida que pueden vender sus productos a un precio irrisorio.
Es por eso que las aplicaciones para aprovechar la comida que te vamos a presentar a continuación pueden convertirse en tus aliadas de tus próximos días si es que quieres aprovechar las ofertas que te proponen.
ToGoodToGo
Probablemente, esta sea una de las aplicaciones más conocidas cuando se trata de evitar el desperdicio de comida. De hecho se ha convertido en el frente del segmento y es que no hay más que ver la cantidad de tiendas y restaurantes que ponen a disposición de los usuarios y los platos que les han sobrado con los productos que no han podido vender.
La plataforma ofrece a los usuarios no solamente diferentes puntos donde comprar estos productos, sino que da a los comercios la posibilidad de cambiar los precios en función del tamaño del paquete que ofrecen. Es importante saber que estos paquetes son sorpresa, lo que significa que lo que vas a recibir no depende de ti, sino del personal de la tienda que te ofrecerá esos productos que no quieren que acaben en la basura, pero que cuyo valor va a ser siempre superior al que pagas.
Encantado de comerte
No lo decimos nosotros sino que este es el nombre de la app que también te puede servir para evitar el desperdicio de comida. aquí también podrás comprar lotes de alimentos que no sean conseguido vender a lo largo del día y con precios reducidos, pero lo mejor de todo es que también te pueden ofrecer productos frescos y además dentro del ámbito del comercio local.

Esto es doblemente bueno porque no solamente estás aprovechando el excedente que nos ha podido vender sino también que promueve el hecho de que te acerques a las tiendas que tienes cerca de tu puerta para comprar su contenido e incluso ver que otras ofertas tienen para el día de mañana acudir a ellas aunque no sea a través de la aplicación.
Olio
Internet ha abierto las puertas a todos los usuarios para no solamente comprar cosas, sino también compartirlas. Puede que con esta premisa te pienses que estamos hablando de esas aplicaciones que te permiten comprar productor de segunda mano, si no que también las hay que permite compartir los recursos entre una comunidad de vecinos.
A esto mismo se dedica Olio, una app que se encarga de redistribuir los excedentes de alimentos a lo largo del mundo y que ayuda a conectar a particulares e incluso empresas para favorecer no solamente el uso de la comida que de otra manera acabaría en la basura sino también de contactar a comercios con restaurantes o servicios de catering para que también puedan aprovechar las ofertas de ese excedente que tienen los pequeños comercios o incluso los supermercados. Al final todo el mundo gana.