A día de hoy son pocos los usuarios que no conocen las bondades del cable USB C. Se trata de lo último en cableado universal para los diferentes aparatos que se pueden conectar entre sí ya sea para llenarlos de energía o para transferir datos de manera rápida. Sea como sea la mayor parte de las veces echamos la culpa al cargador o al dispositivo de que la carga ha fallado pero hoy vamos a echar un vistazo a ese momento en el que el USB C no carga.
Es cierto que se ha convertido en el cable estándar, especialmente en el mundo del teléfono móvil, pero en ocasiones es el latiguillo el que falla y el que es importante echar un vistazo para comprobar si todo funciona correctamente.
El nuevo estándar para conectar cualquier dispositivo
A lo largo de los años los diferentes fabricantes de dispositivos electrónicos han tratado por todos los medios de dar al usuario las mejores prestaciones para que sus aparatos pudieran conectarse de manera sencilla mediante el uso de una conexión universal. Efectivamente, estamos hablando del USB el cual tiene diferentes interpretaciones dependiendo del accesorio que quieras conectar. Esto se ve claramente en los tres tipos de puertos que puede tener un cable o aparato siendo los de tipo a y C y los más extendidos.
Este último ha ganado mucha popularidad en los últimos años gracias a una serie de características como es el hecho de que no tiene una posición predefinida para cargarlo, lo que ha ahorrado a muchos el quebradero de cabeza de si están conectando bien o mal su móvil al cargador. Esto por no hablar de que con los años han mejorado sus características hasta el punto de no solamente se pasa energía por él, también datos a gran velocidad e incluso audio y vídeo de otra pantalla.
De hecho, cuando hablamos de telefonía, incluso Apple accedido ante las exigencias de Europa para estandarizar esta entrada para todos los dispositivos móviles que hay en el mercado tanto a teléfonos como tablets. Es por eso que de ahora en adelante cualquier teléfono móvil se pueda cargar con un cable USB.
Trucos para saber si el cable USB C no carga
Por los motivos que te comentábamos anteriormente, es importante que llegues un cable USB C siempre a mano. Sin embargo, puede que este cable sea objeto de discordia porque no cumple con su función y por eso te vamos a enseñar los principales trucos para saber si es o no el elemento que falla en el proceso de carga.
Revisa si tiene algún tipo de desperfecto
En ocasiones estamos muy centrados simplemente en utilizar el cable de carga que viene por defecto en la caja del teléfono y con él seguir durante años. Por este motivo es fácil perder de vista el estado en el que se encuentra el plástico que recubre el interior del cable, algo que merece la pena revisar cada poco tiempo.
Las zonas que más sufren son principalmente los extremos, ya que son partes más sólidas y en las que en ocasiones se producen dobleces que con el paso del tiempo acaban por romper la estructura plástica y dejar al descubierto el interior del cableado. Así que si tu teléfono deja de cargar con la máxima potencia o simplemente no lo hace, te recomendamos que eches un vistazo a estos dos puntos críticos.
No es un cable compatible con la carga rápida
Este punto es importante y es que muchos usuarios saben que su móvil es compatible con una carga rápida determinada, cosa que su cable no lo es. Esto puede ser un problema para el usuario, ya que perdería la capacidad de cargar su teléfono móvil en unos minutos y tendría que pasarse horas esperando a tener un porcentaje aceptable para afrontar el día.
Por eso puede que tu cable USB C no cargue como esperas y por eso te tendrás que gastar más dinero en buscar uno compatible con esta tecnología y modelo en algunos casos.
Deterioro en la clavija
Del mismo modo que pasa con el deterioro de la parte externa, la clavija es uno de los puntos críticos que debes de tener en cuenta para que tu USB C cargue de la forma más eficiente posible. Admitámoslo, la mayoría de los usuarios no guardan el USB en un lugar seguro ni le ponen una protección para que reciba golpes por la parte metálica, por lo que es fácil que por algún golpe o por la acumulación de suciedad los pines acaben fallando de alguna manera.
Por suerte y con cuidado puedes limpiar esta parte del cable, aunque tampoco estaría de más que echar un vistazo al puerto de carga de tu teléfono para saber si también se trata de un error en la clavija de tu dispositivo.