Si quieres ejecutar Windows en un ordenador sin necesidad de instalarlo en el disco duro, una de las mejores opciones es crear un USB de arranque. De esta forma solo necesitarás un Pendrive que tengas por casa para arrancar desde él sin necesidad de acceder al disco duro de tu equipo, dejándolo como una unidad secundaria.
Eso sí, tienes que tener en cuenta que arrancar Windows desde un USB es más lento que desde un disco duro interno, sobre todo un SSD, pese a que siga siendo funcional para tareas básicas, motivo por el que te recomendamos usar este método solo en ocasiones puntuales ya que, incluso, usar el USB puede dejar tu equipo más expuesto al malware de todo tipo.
Además, no todos los ordenadores admiten el arranque desde un USB y tendrás que mirarlo en la BIOS del equipo tal y como te diremos más adelante.
Crea un USB ‘bootable’
Descarga el archivo ISO de Windows
El primer paso para ejecutar Windows desde un USB es obtener el archivo ISO del sistema operativo que cuenta con la instalación completa de Windows y se puede descargar de la página oficial de Microsoft. Eso sí, hay una ligera diferencia entre hacerlo para Windows 10 u 11.
- Para Windows 10: Ve al sitio web de Microsoft, busca «Descargar Windows 10» y haz clic en el botón para descargar la herramienta de creación de medios. Ejecúta la herramienta y selecciona la opción «Crear un medio de instalación». Luego, elige la opción «Archivo ISO» y descárgalo.
- Para Windows 11: Ingresa a la sección «Descargar Windows 11» en la página de Microsoft. En el apartado «Descargar imagen de disco (ISO)», selecciona «Windows 11 (multi-edición ISO)» y elige el idioma. Luego, presiona el botón de descarga y guarda el archivo en tu ordenador.
Recuerda que es importante contar con una licencia de Windows para activar el sistema cuando inicies desde el USB.
Crea un USB de arranque
Para que el ordenador pueda iniciar Windows desde el USB, debes prepararlo correctamente con una herramienta especial. Existen varios programas para hacer esto, pero nosotros te vamos a recomendar hacerlo con el más famoso y sencillo de usar: WinToUSB
- Descarga e instala WinToUSB desde su página oficial.
- Abre la aplicación y selecciona «Windows to Go USB».
- Busca el archivo ISO de Windows que descargaste previamente.
- Selecciona la edición de Windows que deseas instalar en el USB.
- Conecta una memoria USB con al menos 16GB de espacio libre (preferiblemente 32GB).
- Elige el USB como destino y selecciona el esquema de partición: MBR para ordenadores con BIOS antiguo o GPT para equipos con UEFI más modernos.
- Pulsa «Proceder» y espera a que finalice la instalación.
Inicia el ordenador desde el USB
Una vez que tienes el USB listo, es hora de probarlo en el ordenador y configurar la BIOS del sistema para poder arrancar tu sistema operativo desde el USB. Para ello:
- Conecta el USB al PC.
- Reinicia el equipo y accede al menú de arranque de la BIOS Para ello, presiona la tecla correspondiente (puede ser F2, F12, Esc o Supr, dependiendo del fabricante del PC).
- En el menú de arranque, selecciona la opción de iniciar desde la unidad USB.
- Windows comenzará a cargarse desde la memoria USB.
La primera vez que inicies Windows desde el USB, deberás completar la configuración inicial, incluyendo la activación del sistema y la instalación de aplicaciones, pero una vez que lo hayas hecho, podrás volver a iniciar tu sistema operativo de Microsoft de forma más rápida.