Steam tiene una función poco conocida pero muy práctica llamada Steam Family Sharing y que es perfecta para que con solo comprar un título del catálogo de la plataforma de Valve, puedan jugar varias personas. Y es que hablamos de una función pensada para quienes quieren compartir sus juegos sin recurrir a trucos o infringir las normas de la empresa.
Gracias a esta opción, dos personas pueden disfrutar de una misma biblioteca sin necesidad de comprar los títulos por duplicado, siempre que cumplan con los requisitos establecidos. Lo único mal oes que no van a poder jugar entre ellos a la vez. Y si te lo estás preguntando, no, no es lo mismo que ceder la cuenta, algo que Steam prohíbe expresamente y que podría acarrearte serios problemas con la plataforma.
Este es un método oficial que permite dar acceso a otros usuarios de forma controlada y segura.
Steam Family Sharing
Ponerlo en marcha no tiene demasiado misterio. Lo primero es activar Steam Guard, la capa de seguridad que protege cada cuenta. Después, basta con iniciar sesión en el ordenador del amigo o familiar con la cuenta del propietario y autorizar ese equipo para el uso compartido. ¿Cómo¿ desde la configuración de Steam:
- Abre la app
- Abre el menú superior
- Selecciona Steam
- Entra en Parámetros
- En la columna izquierda entra en la sección Familia
- Dentro de Préstamo familiar, activa la opción Autorizar el préstamo familiar en este equipo
Y ya está, de esta forma tan sencilla, ambos vais a poder, no solo ver la biblioteca completa del jugador principal, sino que los dos (o más), podréis descargar los juegos que os interesen y jugarlos desde vuestro propio perfil. De esta forma, cada uno conserva su avance, sus logros y sus preferencias de juego.

Eso sí, el sistema tiene sus límites. Steam permite autorizar hasta diez equipos y cinco cuentas como máximo, por lo que está pensado más para el entorno familiar o un grupo reducido de amigos. Además, solo una persona puede jugar en un momento dado, por lo que no podeís jugar a títulos multijugador si no compráis el juego por separado. Si el propietario inicia un juego, el otro recibirá un aviso para cerrarlo o comprarlo. En otras palabras, no se puede jugar de forma simultánea, algo que evita que la función se utilice para dividir compras o compartir bibliotecas de forma masiva.
También hay excepciones. No todos los juegos permiten el uso de Family Sharing. Algunos títulos, como ciertos juegos de Ubisoft o EA, no se pueden compartir mediante este práctico método. Lo mismo ocurre con los DLC: si el amigo no tiene el juego base, no podrá acceder a ellos. Incluso hay títulos gratuitos que directamente quedan fuera del sistema. Por suerte, Steam indica claramente cuándo un juego no admite esta característica.
Pero, más allá de estas limitaciones, Family Sharing resulta muy útil para compartir juegos con un amigo o dentro de casa, sobre todo si no se juega a la vez. También sirve para dejar que alguien pruebe un título antes de decidir si comprarlo o no, sin comprometer tu cuenta ni tu seguridad.
Siempre que se use con cabeza, es una herramienta excelente para aprovechar mejor tus compras y ahorrar dinero dentro de la plataforma.










