El gran drama de todos los usuarios de un teléfono móvil es que este se deteriore de alguna manera. Pero vamos a ser más específicos ya que hay un apartado en el que más de uno es capaz de derrochar una lágrima y tiene que ver con la parte frontal de su teléfono. Del problema que supone que la pantalla se rompa y por eso muchos buscan la forma de repararla por sí mismos.
Para el común de los mortales esto es una gran odisea, por lo que supone retirar toda la pantalla y sustituirla por una nueva. Pero yo te adelantamos que no es una tarea fácil y que si tienes dudas lo mejor es que se lo dejes a los profesionales, ya que el más mínimo error no solamente te quita la garantía, sino que además puede dejar el móvil inutilizado.
La pantalla, un elemento imprescindible de tu móvil
Antes de nada es importante hacer una pequeña revisión de lo que supone perder la pantalla del teléfono móvil. Los motivos pueden ser varios que pueden venir desde un descuido hasta una caída intencionada o incluso la colisión de un objeto contra tu móvil que no debería estar en ese sitio. Puede que te suene alguna de estas circunstancias, pero todas ellas acaban en desastre.
Por suerte, no todas las roturas son un problema, ya que muchos usuarios deciden colocar una protección extra a la pantalla sin que esta interfiera en sus funcionalidades. Es cierto que los cristales actuales son capaces de aguantar casi cualquier impacto, pero nunca está de más añadir esta protección adicional que simplemente debe retirar para sustituir por una nueva y comprobar que la pantalla real no tiene ningún desperfecto.
Por eso es importante destacar que muchas veces la rotura de la pantalla del móvil solamente se debe a esta capa de protección y no al de la parte inferior la cual puedes saber que se ha roto por tener alguna clase de interferencia en el panel inferior la pérdida de sensibilidad en el mismo o algún error en el color que interpreta la propia pantalla.
¿Es posible reparar uno mismo la pantalla?
Como te decimos al principio, reparar la pantalla del móvil puede ser una verdadera odisea. Y para los usuarios amantes de la tecnología puede que esto sea un mero trámite, pero debes tener en cuenta que incluso los más profesionales necesitan algo más de una hora para sustituir los componentes que han sido dañados y eso teniendo en cuenta que para sustituir los componentes que han sido dañados y eso teniendo en consideración que tienen un repuesto para esa pantalla de ese modelo en específico, ya que no vale cualquiera.
Otro punto importante es que las pantallas son más difíciles de cambiar de lo que piensas. Aunque estos elementos están en la capa más externa del teléfono necesita conectarse a la placa base para recibir energía y los datos con los que tú vas a trabajar con ella de tal forma que no solamente tienes que sustituir un cristal y un panel, sino también las conexiones que lo enganchan al resto de componentes del teléfono. Por eso es más que probable que tengas que desmontar casi todo el teléfono para poner esta parte tan importante.
Una vez sabido esto, es importante saber que los teléfonos móviles están construidos con una arquitectura diferente en cada modelo y que tienen piezas que no debes tocar si no tienes el instrumental adecuado. De lo contrario, algunos elementos delicados como son las propias conexiones pueden sufrir daños irreparables y lo que se puede convertir en toda una experiencia acaba siendo un problema más grave que te puede costar mucho más de lo que un técnico cualificado te puede pedir por arreglarlo.
Así que a modo de conclusión volvemos a lo que te decíamos al principio: es mejor llevar el teléfono para que te arreglen la pantalla al servicio técnico de tu marca o un taller especializado para que hagan esta sustitución de manera profesional por ti. De lo contrario, aunque pienses que los componentes te van a salir más baratos y también la mano de obra todo puede acabar en un desastre si no es capaz de sustituir correctamente cada componente.