Los ordenadores de torre están muy presentes tanto en oficinas como en casas. Aunque los ordenadores portátiles están ganando cada vez más popularidad, no podemos dejar de lado que los dispositivos de sobremesa ofrecen capacidades muy interesantes en lo que a potencia se refiere. Para que rindan al 100% se necesita que los componentes funcionen a una temperatura aceptable y por eso muchos usuarios piensan que es una buena idea añadir un ventilador extra al ordenador.
Como te puedes imaginar, hay elementos importantes a tener en cuenta que tienen que ver incluso con aspectos que superan la parte estructural de la caja que usas para que tu máquina funcione y guarde todos los componentes.
¿Valen todos los ventiladores para tu ordenador?
Esta es la primera pregunta que te debes hacer cuando quieres aumentar el flujo de aire en tu ordenador. Es tan clave que depende de un montón de elementos antes de ponerte en marcha, tanto que necesitarás tenerlos en cuenta incluso antes comprar estos nuevos aparatos. La realidad es que no todos los aparatos valen por diferentes motivos.
El primero de ellos es el tamaño de la caja, ya que dependiendo de esta podrás utilizar unos de mayor o menor tamaño y ajustarlos a la zona donde lo vayas a colocar. El otro elemento más importante es el espacio que van a ocupar en tu ordenador, tanto que este salta a la vista si tienes en cuenta los respiraderos del aparato que están libres de un ventilador.
Ahora que tienes esto en cuenta, lo más importante que debes hacer es comprobar en la hoja técnica de la caja tanto las medias de esta como si hay alguna indicación de los ventiladores que ya incorpora para saber el tipo que utilizan de serie y encontrar unos similares o más baratos.
También puedes ver si por algún lado estos aparatos traen algún número de serie o marca determinada para que puedas echar un vistazo en Internet cuáles son las mejores opciones en términos de rendimiento. También debes comprobar si tienes conexiones suficientes tanto en la placa o en la fuente de alimentación para surtirlo de energía. Esto también es importante, ya que en la primera conexión el ordenador te permitirá modificar su velocidad y en la primera será un funcionamiento constante y pasivo.
Por supuesto, revisa el flujo de aire de la caja antes de hacer nada, ya que de lo contrario puede que perjudiques la salida de aire y hagas más mal que bien a tu aparato. Nuestra recomendación es que los ubiques o en la parte frontal, siempre que sea posible, o en la parte trasera para que la corriente vaya en una dirección.
Qué necesitas para instalar un nuevo ventilador
Tengamos en cuenta que ya has comprado el nuevo ventilador para tu ordenador. Ahora lo que tienes que hacer no es otra cosa que prepararlo todo para la instalación. Como mínimo necesitarás un destornillador para retirar la tapa del ordenador y anclar los tornillos del ventilador al chasis. Paso por paso, este tutorial se quedaría así:
- Desenchufa el ordenador de la corriente y colócalo en una mesa
- Abre la parte lateral del aparato
- Presenta el nuevo ventilador (o ventiladores) en la parte donde los vas a poner, siempre por la parte interior de la caja
- Con cuidado, coloca los tornillos que hagan de anclaje pero no aprietes mucho
- Conecta los cables a la placa o la fuente de alimentación y colócalos para que no interfieran con el funcionamiento de otro hardware.
- Vuelve a conectar el ordenador a la corriente y prueba que funciona
- Coloca la placa lateral para cerrar el ordenador
Ahora no tendrás problemas de ventilación y, como los ventiladores no consumen demasiado, puedes estar tranquilo de que no tendrás que preocuparte por el consumo energético.
