Elegir tu ordenador perfecto depende mucho de tus necesidades. Para muchos es prioritario elegir bien los componentes del dispositivo pero mucho antes que eso hay que elegir qué tipo de aparato necesitas: una torre fija para trabajar en un puesto concreto o un portátil que te permita moverte y trabajar donde tú quieras. Sea cual sea el caso debe realizar un mantenimiento periódico del aparato y hoy nos vamos a centrar en las llamadas torres, las cuales te vamos a contar cuáles son los pasos más importantes para realizar un mantenimiento correcto de todos los componentes.
Para muchos puede parecer que este procedimiento genere mucha pereza por todas las labores que debes de tener en cuenta pero te aseguramos que hay al hacerlo ayudarás a que los componentes de tu ordenador duren mucho más tiempo y funcionan a pleno rendimiento justo cuando lo necesites.
Qué necesitas para limpiar en profundidad tu ordenador
Lo primero que te puedes preguntar es si de verdad necesitas limpiar tu ordenador tan a fondo y la respuesta es un claro sí. Debes de tener en cuenta que por el ventilador de tu máquina entran partículas de polvo que se depositan en los diferentes componentes desde la placa hasta los propios ventiladores. La situación se empeora si tienes animales en casa, concretamente gatos o perros que suelten mucho pelo y que pueden obstruir las principales vías de refrigeración de la torre sin que lo sepas.
Y es que realizar este proceso es primordial precisamente para mantener tu ordenador a una temperatura siempre idónea. No es la primera vez que te contamos que el polvo es el gran enemigo de los componentes electrónicos, de que si se acumula mucho de este lo más probable es que el aparato tengan sus componentes una manta de pelusa lo suficientemente gruesa como para evitar que el flujo de aire refrigere todo el dispositivo.
Pero esto no es lo único que debes de tener en cuenta ya que un ordenador es mucho más que hardware. Las conexiones entre los diferentes componentes así como reponer los consumibles que necesitan cada aparato, que los hay, forman parte de la labor de todo usuario para que su ordenador estén perfectas condiciones.
Por eso debes de tener en cuenta algunas herramientas como las que te vamos a contar a continuación:
- Aire comprimido: un bote de aire comprimido no cuesta mucho si lo buscas por internet y su utilidad es muy importante en este trabajo. Como pasarlo en trapo no es una opción viable lo mejor es utilizar un bote de este material para que sea el propio aire el que se encargue de limpiar toda la suciedad superficial que se acumulan en los componentes. Te servirá prácticamente para retirar todo el polvo acumulado tanto fuera como dentro de la carcasa y todo sin tener que tocar ningún material.
- Pasta térmica o líquido de refrigeración: aquí tenemos dos elementos muy importantes que debes de tener en cuenta dependiendo del tipo de refrigeración que tenga tu ordenador de sobremesa. En el de la pasta térmica te ayudará para sustituir la que seguramente venía de serie tanto para tu procesador CPU como el de tu tarjeta gráfica. Ciertamente tendrás que usar las herramientas necesarias para desacoplar estos materiales y volver a poner nueva pasta térmica para que todo funcione correctamente. En caso de que tengas una refrigeración líquida de tipo custom, rellenar el sistema con nuevo líquido es indispensable para que todo vuelva a funcionar como el primer día.
- Alcohol isopropílico: como sabrás no se puede lavar los componentes del ordenador con agua y jabón. Esto es un sacrilegio para cualquier amante de la informática, ya que lo único que conseguirás es estropear el hardware. Para las tareas de limpieza lo mejor es utilizar alcohol isopropílico el cual solamente se deberá utilizar para retirar los restos de la pasta térmica de la CPU y los sistemas de refrigeración de manera segura y sin estropear nada de estos aparatos. Acto seguido ya podrás poner la pasta térmica que hayas elegido para garantizar el correcto funcionamiento de este sistema.
- Un paño de microfibra: este lo utilizarás única exclusivamente en las partes más grandes y que no tengan componentes electrónicos que, en resumidas cuentas, son pocos. Concretamente, la carcasa y la fuente de alimentación las puedes limpiar simplemente con un poco de aire comprimido y pasando este elemento textil por ellos para garantizar de que no se quedan ni una mota de polvo.
Es cierto que los últimos años los fabricantes de hardware se han esmerado para que construir un ordenador de sobremesa sea una tarea sencilla tanto para el servicio técnico como para el propio usuario aunque eso no significa que no necesites por lo menos de un destornillador para retirar algunos tornillos que simplemente se utilizan para fijar algunas piezas ya sea a la propia placa o incluso a la carcasa
Pasos para limpiar tu ordenador a fondo
Una vez que tengas todos estos elementos en tu poder, puedes proceder a la limpieza de tu ordenador. Lo suyo es empezar de fuera hacia dentro, por lo que debes de tener en cuenta que las partes más superficiales deben de limpiarse antes que las interiores. Es importante que antes de ponerte a limpiar el ordenador lo desconectes de la corriente y lo dejes en reposo durante unos minutos antes de comenzar para evitar cualquier problema relacionado con la electricidad estática que tienen estos componentes.
La construcción de los ordenadores, o por lo menos de la gran mayoría, permite que puedas abrir las carcasas por los laterales bien porque tengan una placa metálica o porque tengas por alguno de los lados que retirar un cristal templado desde el que ver el interior. Con un poco del aire comprimido y de la bayeta de microfibra empezarás limpiando todas las partes exteriores del ordenador. Si tienes alguna rejilla frontal lo suyo es que también desacoples los filtros y las carcasas para limpiarlas de cualquier mota de polvo que puedan tener.
Durante este proceso es posible que hayas tenido que quitar algún ventilador por el camino por lo que ya podrías tener estos elementos limpios gracias al aire comprimido. Después solamente tenemos que ver el resto del ordenador. En su interior podrás pasar el paño de microfibra por la base del ordenador así como desacoplar la fuente de alimentación para limpiarla todo lo posible.
Llegando a la parte más delicada, los procesadores tanto de la tarjeta gráfica dedicada, si es que la tienes como del chip central de tu placa base, requerirán de desatornillar los complementos de ventilación para comprobar el estado de la pasta térmica que llevaban probablemente de fábrica. Ya que estás realizando el mantenimiento utiliza el alcohol isopropílico para limpiar la superficie del chip como del dispositivo de ventilación elegido de tal forma que una vez que se sequen puedas colocar la pasta térmica de la forma que tú consideres para garantizar una correcta refrigeración de este componente.
Por si acaso vuelve a pasar el aire comprimido para eliminar cualquier mota de polvo que se haya podido quedar en la placa base o en cualquiera de estos aparatos y acto seguido monta de nuevo todo el aparato.