Las tarjetas microSD son muy útiles para tener más espacio en nuestros móviles, portátiles, tablets y muchos dispositivos electrónicos modernos. Sin embargo, en medio de tantas tarjetas de este tipo que hay en el mercado, hay un riesgo escondido: las tarjetas microSD falsas.
A pesar de parecer una ganga, en realidad este tipo de falsificaciones pueden traerte más líos de los que te esperas y por eso es tan importante aprender a identificarlas para no caer en la trampa y, sobre todo, que no te lleves sorpresas desagradables.
¿Por qué las tarjetas microSD falsas son peligrosas?
Las tarjetas microSD falsas no han pasado casi ninguno de los controles de calidad a los que se someten los productos de Kingston o Sandysk, por citar algunas de las marcas de almacenamiento más famosas y motivo por el que estas son más caras. Debido a ello, pueden dañar tus dispositivos y hacer que pierdas tus archivos.
Además, muchas de estas tarjetas microSD falsas dicen tener más espacio del que realmente tienen. Imagina que compras una tarjeta que dice tener 128 GB pero en realidad solo tiene 16 GB. Esto puede causar problemas si tratas de guardar demasiados archivos en la tarjeta y no cabe más allá de que habrás pagado por ella más de lo que en realidad cuesta.
Y eso por no hablar de lo mucho que tardan en transferir datos. Si utilizas una tarjeta falsa para guardar fotos o grabar vídeos en alta calidad, notarás que el proceso va muy lento y no funciona bien. Incluso algunas apps o juegos pueden tener errores o no cargar correctamente.
Poniéndonos un poco más dramáticos, las tarjetas microSD baratas incluso pueden romper el lector de tarjetas de tu dispositivo y dañarlo. Por eso es importante usar tarjetas de buena calidad para evitar problemas.
Trucos para detectar si una tarjeta de memoria microSD es falsa
Si no quieres perder tus datos, y recibir ni más ni menos que aquello por lo que has pagado, sigue estos consejos para evitarte problemas. Por supuesto, hablamos de trucos a seguir antes de comprar, para evitar que te engañen, por lo que no servirán de nada si ya has pagado por ella.
Compra en lugares donde sepas que puedes confiar
El primer consejo es fácil: compra en tiendas que ya conozcas y sean oficiales. No compres en páginas web que no sean seguras o en sitios como Amazon o eBay si el vendedor no tiene buenos comentarios. Si te ofrecen algo muy bueno a un precio muy bajo, es probable que sea una estafa.
Mira la caja o envoltura del producto
Las tarjetas microSD falsas generalmente vienen en envases económicos. Si la caja se ve fea o tiene letras mal escritas o dibujos mal hechos, o con baja resolución, puede significar que hay algún problema con el producto. Si puedes, compara el envase con una foto de una microSD original en Internet.
Observa la tarjeta en detalle
Algunas tarjetas falsas pueden tener diferencias en su diseño con respecto a las tarjetas originales. Es posible que el logo no esté impreso correctamente, que la capacidad no esté bien indicada o que el número de serie tenga errores.
Consulta las opiniones
Hoy en día casi todos los minoritas y tiendas que se dedican a la venta de este tipo de productos cuentan con opiniones de los clientes que ya han comprado el producto antes que tu. Fíjate si hay algunas opiniones que hagan referencia a problemas con la tarjeta de memoria.