En función de la pantalla que tengas, es posible que haya perdido algo de luz con el paso de los años. Te contamos cómo puedes solucionar el clásico problema de que la pantalla del ordenador se vea demasiado oscura.
Los paneles de las pantallas de los ordenadores con los que trabajamos actualmente tienen cada vez una mayor calidad y actualmente son capaces de ofrecernos una excelente experiencia de usuario. Sin embargo, son muchos los motivos que pueden provocar que la pantalla de nuestro ordenador se vea más oscura lo que queremos o de lo que estamos acostumbrados. Pese a que es habitual alarmarse en un primer momento, la realidad es que no siempre obedece a casos de gran gravedad y es posible encontrar una solución incluso sin tener que acudir al servicio técnico.
En este artículo te vamos a dar una serie de consejos que te van a ayudar a poder recuperar el brillo de tu pantalla. En el caso de que ninguna de las opciones que te vamos a proponer a posterioridad sea suficiente como para asegurar tu experiencia de usuario, lo único que puedes hacer es ponerte en contacto con el fabricante de tu ordenador para que te asesore de manera personalizada.
Comprueba el brillo
En muchas ocasiones, la solución más efectiva es la más sencilla. Si notas que la pantalla de tu ordenador ha perdido brillo sin motivo aparente, es probable que lo hayas ajustado al mínimo sin darte cuenta. Para solucionarlo, lo único que tienes que hacer es volver a los ajustes del brillo de tu pantalla y comprobar cuál es el nivel que tienes configurado actualmente.
En la inmensa mayoría de los ordenadores, también vas a poder encontrar este menú de configuración directamente desde el teclado de tu PC. Por lo tanto, ni siquiera es necesario que accedas a complejos menús de configuración. Presta atención a los dibujos que encontrarás en el teclado de tu equipo y comprueba si puedes llevar a cabo los ajustes necesarios directamente presionando alguna combinación de teclas.
Reinicia el equipo
Si la solución anterior no funciona, otra alternativa bastante simple pasa por reiniciar nuestro ordenador. Esta es una solución muy sencilla, pero también es muy eficaz. Y es que puede que algún proceso se haya quedado atascado en un segundo plano y esto esté provocando algún problema a la hora de visualizar de forma correcta nuestra pantalla. Cuando reiniciamos nuestro ordenador ponemos fin a todos aquellos procesos que pueden tener algún problema y sean que han quedado suspendidos. Por lo que te recomendamos que reinicies el ordenador y compruebes si, una vez encendido de nuevo, puedes recuperar el brillo inicial.
Analiza el ordenador con algún antivirus
Durante los últimos años nos hemos acostumbrado a que gran parte de otros problemas que afectan a nuestro ordenador tengan su origen en algún virus que ha intentado a nuestro equipo. En el caso que estamos tratando, también puede ocurrir. Por lo que lo mejor que puedes hacer es analizar el ordenador con algún antivirus y descartar cualquier problema derivado de algún tipo de malware.
Como hemos podido comprobar, solucionar este problema puede ser más sencillo de lo que en un principio puede parecer. Presta atención a estos consejos y comprueba si puedes mejorar el funcionamiento de tu equipo.