imagen de un raton de ordenador

Cómo funciona la estafa Double-clickjacking y por qué deberías protegerte de ella

Protegerte de las estafas es básico para tu seguridad.

Las estafas están a la orden del día y los grupos de ciberdelincuentes aprovechan todas las opciones que existen para hacerse con los datos personales o bancarios de sus víctimas. Te contamos cómo funciona la estafa del Double-clickjacking y por qué es tan importante.

Las ciberameanzas están cada vez más presentes en nuestro día a día. Más allá de las más comunes, como los clásicos ataques de phishing, la realidad es que los hackers se las ingenian de todas las maneras posibles para tratar de acceder a nuestra información y a nuestros datos en cualquier momento. Para ello, no escatimen en explorar todas las opciones que tienen a su disposición. Algunas de ellas, incluso, parecen inverosímiles  hasta que no se produce algún caso concreto.

Y esto es precisamente lo que ha ocurrido con la estafa conocida como el doble clickjacking. Y, como se desprende de su propio nombre, la estafa se articula hackeando el doble clic tradicional que todos nosotros hemos hecho, y seguimos haciéndolo, con el ratón de nuestro ordenador. ¿Quieres conocer todos los detalles? 

Cuidado con las ventanas emergentes

Se ha conocido que la estafa comienza con alguna ventana emergente, que simula ser un Captcha, que nos obliga a tener que hacer un clic en algunas de las diferentes opciones que aparecen en ella. Pese a que aparentemente es una página inofensiva, la realidad es que detrás de ella es esconde un timo que busca hacerse con el control de nuestro dispositivo. En el momento en el usuario realiza un doble clic, la página redirige al usuario a un sitio malicioso mientras el pop up se cierra. 

Lo peligroso de todo el proceso es que resulta especialmente complejo darse cuenta de que estamos cayendo en una estafa. Puesto que, hasta ese momento, lo único que hemos hecho es realizar una doble pulsación en algún botón de una ventana emergente. Algo que es bastante común para todos aquellos que estamos acostumbrados a navegar por internet bastantes horas al día. 

Un código malicioso escondido bajo una acción común

Los atacantes insertan un código malicioso entre el primer y el segundo clic que realizamos con nuestro ratón para desprendernos de la ventana en cuestión. En el momento en el que realzamos el primer clic, comienzan a aparecer otros elementos que se lanzan en el momento en el que realizamos la segunda pulsación. Como usuarios, apenas nos damos cuenta de ello, puesto que el cambio se produce en milésimas de segundos. 

Las posibilidades que ofrece esta amenaza a los ciberdelincuentes son ilimitadas, puesto que las consecuencias van desde la autorización de una transferencia bancaria hasta la realización de un pago con tarjeta, incluso sin darnos cuenta de lo que estamos haciendo. Protegernos de ellas es muy difícil, dado lo bien trabajado que se encuentra toda la interfaz. Por lo que te recomendamos es que extremes las precauciones ante las ventanas emergentes que puedan surgir a partir de ahora mientras navegas para evitar males mayores. 

Si ya has caído en una de estas estafas, nuestra recomendación es que te pongas en contacto con las autoridades pertinentes para que te indiquen cómo proceder en el caso de que hayas pulsado cualquier enlace.

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