Los televisores son aparatos que están presentes en todos los hogares con el fin de ofrecer a todos los miembros de la casa un lugar donde pasar un rato agradable o informarse. El caso es que durante la vida útil de este dispositivo es de lo más normal encontrarse en la tesitura de escuchar algunos chasquidos o incluso crujidos que vienen del interior del aparato y eso a día de hoy es una gran incógnita para cualquier persona que lo tenga justo de frente.
Como ocurre con todos los dispositivos de este calibre es normal escuchar de vez en cuando algún tipo de sonido que pueda ser un tanto anómalo pero no necesariamente tiene por qué ser el indicio de un problema.
Pese a la evolución de los televisores los chasquidos siguen siendo algo normal
Probablemente, muchos recuerden en la primera vez que vieron un televisor o incluso que este llegara a su casa. En los primeros años podíamos ver que las pantallas eran sustancialmente más pequeñas que las que puedes ver a día de hoy colocadas en cualquier estantería de una tienda de electrónica, pero una cosa de las que no han cambiado ha sido que sigue siendo un elemento grande que se suele colocar en el salón de una casa.
Volviendo a estos inicios, la composición de los primeros televisores se caracterizaban por tener un tubo de neón que probablemente era lo que más ocupaba dentro de la caja del dispositivo y todo esto junto a otros dispositivos que permitían expandir la imagen que luego se veía en el cristal.
Como sabrás, a día de hoy se utilizan paneles de todo tipo que no solamente han facilitado que las cajas de estos aparatos sean mucho más delgadas, sino que también dispongan de una antena interna y un descodificador para que la señal se reciba correctamente en el dispositivo. Pero hay cosas que no cambian como por ejemplo la presencia de una placa en la que colocar los diferentes transistores y conectores que hacen que los sistemas de alimentación funcionen y surtan de energía a todos esos elementos que cumplen su función para que al final tú veas la imagen justo en el panel.
El problema es que por muy nuevo que sea el televisor puede que tengas alguna duda cuando del mismo modo que pasaba antes también escuchas algún tipo de crujido o chasquido proveniente del interior.
¿Por qué cruje mi tele? ¿Es realmente un problema?
Vamos a lo que realmente nos importa hoy y es dar una explicación a esos crujidos o chasquidos que suenan desde el interior del televisor de tu casa. Y es que lo primero que debes de saber es que estos sonidos no son realmente un problema para el funcionamiento del aparato.
De hecho son algo de lo más normal por lo que no te asustes si de vez en cuando escuchas alguno mientras estás viendo tu programa favorito o jugando. Las causas más habituales son:
Los materiales de tu televisor se expanden y contraen
Una de las cosas que tienes que saber es que tu televisor está compuesto por diferentes elementos construidos en diferentes materiales pero principalmente te los puedes encontrar con plásticos y metálicos. El problema es que estos dos materiales tienen una cosa en común y es que responden a las variaciones de temperatura que reciben desde el interior del aparato.
Por eso es tan importante que tengan huecos por donde eliminar el calor que se acumula en el interior del chasis ya que de otra manera será más frecuente que escuches diferentes chasquidos que tienen que ver directamente con la contracción y expansión de estos materiales.
Los cambios de temperatura
Aunque ya tenemos dicho en el apartado anterior, es importante recalcar que los cambios de temperatura hacen que sea más frecuente la aparición de estos chasquidos. En las épocas donde las temperaturas se vuelven más extremas, como son el invierno y el verano, es más frecuente tener este tipo de situaciones en las que escuches estos sonidos metálicos o plásticos del interior del aparato.
Por poner un ejemplo las estancias se calientan mucho por el día en verano, pero si por algún casual tiene su sistema de aire acondicionado funcionando puede que mantengas la estancia a una temperatura más agradable aunque en el momento en que lo quites se producirá esa variación de tal manera que el aparato produzca estos chasquidos.
Un tiempo de uso excesivo
Sea todo lo que te hemos comentado antes le sumamos a que estás utilizando el televisor durante mucho tiempo, puede que escuches estos chasquidos al acabar tu sesión de ocio.
Para todos esos jugones que juegan en el salón de su casa seguramente es habitual pasar un par de horas poniendo a tope no solamente las funciones gráficas de la consola o el ordenador, sino también de las capacidades del panel de tu televisor.
Y es que cuantas más horas permanezca este encendido y funcionando con un alto nivel de rendimiento lo más probable es que al apagarlo los materiales empiecen a crujir un poco.