En los últimos años hemos visto como en los diferentes fabricantes de smartwatches han mejorado sus productos hasta límites prácticamente insospechados. Lo que en un principio iba a ser un dispositivo para darte la hora controlar tu ritmo cardíaco y conectarse con tu teléfono para realizar alguna que otra tarea de visualización se ha convertido en un elemento importantísimo para la vida diaria de muchos. Tanto es así que los más deportistas se preguntan en ocasiones como es posible que su dispositivo sea capaz de reconocer la actividad que está haciendo.
Y es que en un principio estos aparatos estaban pensados para que simplemente tuvieras el control de las actividades de deporte más sencillas como por ejemplo una caminata o una sesión de ejercicio de resistencia.
Haz ejercicio y despreocúpate del reloj
El gran atractivo de un reloj inteligente se basa en su capacidad para reconocer diferentes actividades deportivas con las que puedes hacer un seguimiento de cómo rindes en cada ejercicio. Son muchos los que lo hacen simplemente por tener el control de los diferentes parámetros del ejercicio, desde repeticiones pasando por vueltas o hasta las calorías que han quemado durante su sesión.
Lo mejor de todo es que con el paso del tiempo los fabricantes no solamente han aportado diferentes modos de trabajo reconocibles por el dispositivo, sino que es el propio aparato el que es capaz de reconocer cuando se está realizando cada uno de ellos.
Y esto es lo más interesante, ya que no sonaba antes se dedican a realizar un seguimiento general de la actividad, sino que también se adaptan a los valores estimados de kilocalorías que se gastan en función de cada actividad. Y es que no es lo mismo realizar un ejercicio de carrera continua que levantar pesas y en cada uno de ellos se gasta más o menos energía.
Como detectar un reloj inteligente tu actividad
En este apartado nos tenemos que poner un poco más técnicos, ya que tenemos que hablar de todo lo que hace posible que un reloj sea capaz de detectar un deporte. Es cierto que hay muchos usuarios que saben que en el apartado de los ajustes de su dispositivo pueden programar alguna rutina para que el reloj sepa que a una hora determinada sueles hacer un ejercicio lo que hace mucho más sencillo y sobre todo rápido la configuración de este aparato para empezar a trabajar.
Sin embargo, en la autodetección se tienen en consideración algunos parámetros que influyen de manera interna y externa. Por un lado, interpretará que estás haciendo un trabajo con tu cuerpo en el momento en el que note alguna variación en tu respiración y en tu ritmo cardíaco que sea superior al habitual. De hecho, la función de autodetección de algunos relojes inteligentes te darán las sugerencias de si quieres registrar esa actividad como un ejercicio, lo que viene bien para que el aparato distinga entre un momento de deporte y uno en el que por ejemplo tienes que correr para coger el autobús.
Pero debes tener en cuenta que hay elementos internos que hacen que el hardware del reloj funcione acorde a unas necesidades concretas. Gracias a los sistemas como el giroscopio o los diferentes sensores que captan el movimiento que realizas es posible obtener unas mediciones más concretas no solamente cuando sales a correr sino también cuando nadas, ya que el reloj notará el movimiento del brazo o incluso el trabajo de gimnasio si haces ejercicios variados.
A día de hoy son muchos los modelos que son capaces de obtener estos datos simplemente con el movimiento, por lo que es cuestión del usuario elegir cuáles son sus rutinas y de esa manera programarlas o dejar que el propio reloj se encargue de obtener datos de ellas