Jugar a videojuegos es una de las cosas más gratificantes para muchos. Para la gran mayoría hay que usar un mando para controlar al personaje de turno o, como mucho, un ratón y un teclado. Sin embargo, dependiendo del título tal vez te hayas encontrado con la posibilidad de usar un accesorio muy loco para jugar, lo que hace que la experiencia no solo sea algo extraña.
El caso es que estos accesorios son de lo más curiosos y algunos han pasado a la historia para bien, otros por ser verdaderos objetos de coleccionista y otros por ser un tremendo fiasco los mires por donde los mires. No nos entretenemos más porque tendrás ganas de saber cuáles son algunos de ellos
PowerGlove
Empezamos por uno de los accesorios más locos que nos ha dado Nintendo. La gran N ha destacado siempre por ir un paso por delante en lo que a jugabilidad se refiere. Con Wii se lucieron, pero es que mucho antes de la llegada de esta consola con la NES plantearon algo parecido con el PowerGlove.
El invento era un guante que reconocía el movimiento del brazo del usuario y, dependiendo del juego, hacía la acción solicitada. Sin embargo, el proceso de instalación era un poco tedioso. Lo más fácil era enfundarse el guante, porque luego había que instalar un sensor sobre la tele y después insertar un código para que el guante funcionase si el juego era compatible.
La resolución: una forma de adelantarse al futuro que quedó en eso, un intento y un objeto de coleccionista para los amantes de la marca.
Activator
El pique entre SEGA y Nintendo en los años 90 será de los más recordados durante años, como las invenciones de una y otra por destacar en un mercado como era el de los videojuegos domésticos de entonces. Pero había que dar a los jugadores más y más, y mientras una emulaba el movimiento con el guante que te comentábamos antes, la firma de Sonic lo hacía con Activator.
Era lo más parecido a montar un Scalextric para la consola por eso de que tenías que montar una infraestructura para jugar. En esencia, era un octágono con el que transmitía las órdenes ‘rompiendo’ unos haces de luz con los brazos y las piernas, lo que lo hacía perfecto para juegos de lucha. Sin embargo, el problema estaba en que cada lado era un botón y, al final, era más fácil jugar con el mando que con este accesorio tan loco.
Aura interactor
Como puedes ver estos accesorios locos para videoconsolas vienen de la mano de un intento de innovar más de lo debido. Y es aquí donde entra Aura Interactor. Por fuera cualquiera lo veía como una mochila de plástico que se usaba para algunos juegos de lucha con el fin de ‘sentir las patadas y puñetazos que recibía tu personaje’.
Hoy en día esta tecnología se ha pulido mucho más con la actual realidad virtual, pero lo que hacía era usar un subwoofer para emular esos impactos. Al final no era un dispositivo muy operativo, por lo que la idea no cuajó del todo pero se le recuerda.
El mando-motosierra de GameCube
Uno de los juegos que salió exclusivo para GameCube fue Resident Evil 4. El juego de la mítica saga de zombis ambientado en España acaparó las miradas de muchos y, además, se ha convertido en un juego de los más codiciados del sistema precisamente por su exclusividad en su momento y por lo fuerte que la gran N apostó por él. Tanto fue así que había una edición especial de la consola con el juego.
Pero lo que puede que pocos sepan es que Resident Evil 4 también dio a la consola uno de los accesorios más locos de la historia: mando-motosierra. Era una referencia a uno de los enemigos del pueblo donde se desarrolla la aventura, pero tenía toda una botonera funcional para jugar con él. Sin embargo, se ha convertido en un objeto de culto que solo unos pocos mantienen.
La tabla de Tony Hawk
Si hay un deportista que ha ganado mucho dinero con su propia imagen en el mundo de los videojuegos ese ha sido Tony Hawk. El famoso skater tenía una franquicia de juegos con su nombre y, por si fuera poco, es uno de los títulos más importantes de la historia de PSX y PS2. Sin embargo, no todos han sido tan buenos en especial el llamado Ride que tenía un accesorio de lo más curioso.
Resulta que a este juego solo se podía jugar usando una tabla electrónica con la que hacer trucos en el suelo de tu salón. Claro… la idea sobre el papel sonaba muy bien, pero seguro que más de uno quiso hacer un kickflip y acabó golpeando un mueble del salón y un moratón por la caída.
