El mundo de la logística y el transporte es probablemente uno de los más importantes cuando hablamos de la tecnología que la rodea. No solo hablamos de que se necesita el apoyo de numerosos ingenieros, Que sepan exactamente cómo funcionan las piezas que se interconectan entre sí para mover toneladas de metal, También se necesita un buen diseño que haga que todo se mueva de una manera eficiente y cuando más ligera mejor. Por eso es importante tener en cuenta muchos factores cuando hablamos de la construcción de un tren y en el caso del tren bala de Japón nos encontramos con uno de los diseños más importantes de los últimos años.
Como sabrás se trata de un vehículo que no solo desafía las capacidades de estos vehículos en lo que a velocidad se refiere, sino que gracias a un problema lograron que no se perdiera velocidad ni mucho menos provocarán malestar en las ciudades por las que pasaba especialmente las que están cerca de los túneles.
El Shinkansen, una obra de ingeniería sobre ruedas
Para muchos moverse en ferrocarril es algo de lo más habitual, sobre todo para todos aquellos que utilizan el metro como medio de transporte habitual. Pero cuando hablamos de recorrer largas distancias son los de alta velocidad los favoritos de cualquier viajero. Al tener vías que apenas tienen curvas es posible mantener una velocidad alta, Pero en este caso tenemos que hablar del famoso Shinkansen de Japón.
Comúnmente conocido como tren bala, tiene nada menos que nueve líneas que cubren todo Japón, ayudando en gran medida a conectar las diferentes ciudades y regiones en cuestión de horas. Es cierto que este tipo de trenes está presente en muchas ciudades, pero lo cierto es que en el país nipón tiene una forma muy característica que no solamente lo hace único en diseño sino también en términos de eficiencia energética y sobre todo de respeto al medio ambiente por no hablar de alcanzar altas velocidades gracias a esto mismo.
Inspirado en la naturaleza
Pues sí en ocasiones la naturaleza es la respuesta a problemas a los que la tecnología no es capaz de dar una solución sencilla en primera resulta que el problema llega cuando el tren bala circula a gran velocidad y se encuentra con uno de los elementos imprescindibles para garantizar la conexión entre ciudades que no es ni más ni menos que un túnel.
A primera vista esto no debería ser un problema, pero la realidad es que el diseño estándar de este tren hace que su tránsito sea un problema grave tanto para la naturaleza como para los vecinos de las ciudades por las que pasa.
Resulta que el diseño de los trenes que circulan altas velocidades tienen una nariz corta y chata, lo que hace que su resistencia al viento sea lo suficientemente óptima para mantener una alta velocidad de manera constante. Pero el problema es que al entrar en un túnel el aire se compacta y se crea una onda sonora que va avanzando a la vez que el tren. Esto provoca que a su salida se genere un sonido similar a una gran explosión y es aquí donde entra en juego la propia naturaleza
Diferentes ingenieros dieron con la solución de prolongar la nariz lo suficiente para que la resistencia al viento no solamente redujera un 15% su eficiencia energética, sino también para que la onda sonora generada quedase reducida al mínimo y no crease el estruendo a su salida.
De esta manera, la forma del vehículo es mucho más eficiente y todo gracias a un diseño inspirado en el martín pescador. Para los que no lo sepan, esta ave tiene un pico muy alargado y con una aerodinámica tan buena que le permite zambullirse en el agua prácticamente sin perder velocidad para alcanzar sus presas. Al no crear tanta resistencia no solo no pierde velocidad, sino que además es capaz de capturar su comida y volver a la superficie rápidamente, haciendo que las ondas generadas en el momento de su inmersión sean mínimas para evitar que se quede dentro del agua y no pueda salir.
Aplicado al vehículo sobre raíles, el morro alargado es, como decíamos antes, el motivo por el que el sonido sigue viajando por el túnel sin que el tren haga de ‘tapón’ evitando el estruendo al final de este.