Hace algo más de 10 años que la concepción de ordenador portátil era símpeme para trabajar. Era el dispositivo perfecto para ello, ya que tenías todo lo necesario para trabajar en un mismo sitio. Con el tiempo, la temática gaming se ha asentado en estos dispositivos porque después de una dura jornada de trabajo no viene mal una partida. Por eso, porque quieres jugar a tope allá donde vayas, te vamos a contar qué es lo que necesitas saber para comprar tu próximo portátil gaming.
Estamos hablando de sistemas cerrados, es decir, aquellos que el fabricante ha elegido las piezas y las ha integrado en una caja propia. Por este motivo, necesitas echar un vistazo a la lista de componentes para tener claras las capacidades de tu nueva máquina.
Diferencias entre un portátil tradicional y uno gaming
Para los entendidos en la materia, las diferencias entre un portátil gaming y uno con capacidades más modestas es evidente hasta por fuera. Para empezar, los diseños son muy diferentes de un tipo a otro ya que pasamos de un diseño más fino y elegante a uno más agresivo y luminoso por fuera. Lo bueno es que gracias a las nuevas técnicas de construcción hay portátiles gaming que son mucho más ligeros con toda la potencia que necesitas. La serie Lenovo Legion Slim es una prueba de ello, donde no te faltará ni potencia ni conexiones para trabajar ni jugar allá donde vayas.
Además, mientras que en uno se busca la funcionalidad y lo práctico, el ordenador gaming podría considerarse un peso pesado. Gracias sus componentes derrocha potencia por todas partes y está mejor preparado para tareas de lo más exigentes tanto a nivel de entretenimiento como para soportar programas realmente pesados como edición de video o modelado 3D.
Principalmente, esto último es lo que lanza a más de uno a invertir su dinero en un portátil gaming antes que en uno convencional. Al final, si tu trabajo exige lo mejor de lo mejor en componentes, o por lo menos algo que se defienda con soltura en condiciones exigentes, no cabe duda de que es el ordenador perfecto.
Qué buscamos en un portátil gaming
Vamos a echar un vistazo a la parte más importante: los componentes. Como te hemos dicho antes, los ordenadores gaming más modernos tienen nuevas formas de fabricarse, lo que ha hecho que sean más fácil de transportar sin sacrificar componentes internos. Echemos un vistazo a los componentes más importantes:
La pantalla
Por supuesto, para jugar bien hace falta una pantalla que rinda a la perfección. En el mercado te puedes encontrar de varios tamaños, pero lo importante está en sus prestaciones. Algunas como la tasa de refresco (que debería darte al menos 120 Hz), compatibilidad con HDR y una buena resolución que llegue al FullHD o superior son más que importantes.
Pero si hablamos de gaming también tenemos que hablar de las capacidades de las tarjetas gráficas, donde si es compatible con AMD Freesync o NVIDIA G-SYNC sabrás que tienes delante un portento visual que no te dejará tirado ni en capacidad ni en calidad de visionado.
Conexiones
Hace muchos años que las unidades ópticas integradas en el chásis de un portátil ya no se usan, algo que ha mejorado el diseño y la distribución interna de los ordenadores. Sin embargo, es innegable que un buen ordenador gaming no debe ir falto de estas. Contar con las últimas versiones de vinculación inalámbrica por WiFi y Bluetooth es importante, pero tampoco debemos dejar de lado las físicas como son el cable HDMI, un lector de tarjetas SD y los puertos HDMI además de USB tanto A como C son imprescindibles para usar tu ordenador con todos los complementos que necesitas. Tampoco te olvides de la conexión Ethernet, vital si quieres entrar en Internet por cable.
El espacio interno y la RAM son importantes
Vamos a un tema que cada vez importa más a los que se quieren comprar un portátil gaming. Aquí tenemos que hablar de que la mayoría de los discos duros son SSD, perfectos en velocidad y rendimiento. Sin embargo, la capacidad es algo importante ya que cada vez los juegos pesan más e instalar un Howard’s Legacy que ocupa casi 100 GB puede mermar bastante tu disco de 512 GB. Por ese motivo, te recomendamos que busques siempre este mínimo o incluso apostar por los de 1 TB.
Si nos vamos a la RAM, estamos en una tesitura importante. Ten en cuenta que el procesador será bastante potente y si necesitas hacer tareas pesadas no te puede faltar memoria volátil. Por eso, apuesta por los 16 GB en adelante.
El procesador
Elegir un portátil gaming va también en gustos de componentes. Las diferencias aquí están entre elegir AMD Ryzen o Intel Core. Ambas compañías te van a ofrecer un buen rendimiento, y cuanto mejor sea su serie de procesador más potencia te brindarán. Las series Ryzen 5 y Ryzen 7 además de las i5 e i7 respectivamente son más que eficientes y dan un buen rendimiento, por lo que elijas la marca que elijas tendrás un buen producto.
La gráfica
Aquí volvemos a la misma situación que antes: dos casas con dos productos muy similares. En este caso, los fabricantes son AMD y Nvidia, dos casas que llevan tras de sí años de incesante rivalidad por colarse en el chipset de tu ordenador. Por supuesto, volvemos a los gustos, sabiendo que las últimas versiones te van a dar una gran compatibilidad y rendimiento con los juegos más modernos. Además, tener una gráfica potente integrada tiene sus ventajas, ya que desde hace años sus prestaciones son iguales que las de sobremesa, por lo que no te preocupes por eso de tener menos potencia porque será exactamente la misma.
La refirgeración
Este es un gran escoyo para los portátiles, lo que no significa que no tenga una buena solución. En Lenovo tenemos diferentes opciones pensadas para los usuarios más jugones como es la refrigeración dual con ventilación por aire tradicional de alta potencia. Nos hemos esforzado para que incluso en estas situaciones el ruido sea mínimo aportando un buen rendimiento. Además, son cada vez más comunes la integración en de refrigeración líquida, un elemento importante para mantener los procesadores a una temperatura óptima.
Por supuesto, el precio
No podemos acabar esta guía sin mencionar lo que más preocupa a los usuarios. Aquí tenemos buenas y malas noticias. Las malas son que si quieres comprar un ordenador portátil gaming de última generación tendrás que pagar hasta cuatro cifras por él. Todo dependerá de los componentes, claro está, y aunque los hay que se quedan en los 900 euros la recomendación es gastarse un poco más y apostar por algo mejor. ¿Y cuáles son las claves? El procesador y la gráfica. No queremos decir que todo lo anterior no cuente, ya que estaríamos dejando de lado partes importantes del dispositivo, pero una versión más potente de cualquiera de los dos te ofrecerá mejor fluidez.
