Trabajar desde la nube se ha convertido en algo rutinario para muchos, y es que es el método preferido a día de hoy para guardar el trabajo que haces y compartirlo directamente con otras personas. Otros prefieren hacer el paso contrario: descargar los datos, trabajar en local y después subirlo a la nube, lo cual es un proceso más largo de realizar que no tiene en cuenta los cambios hechos en vivo por el resto de usuarios si es que es un documento colaborativo. Pero sea como sea, puede que te hayas encontrado en la tesitura de no poder descargar un archivo de Google Drive y hoy te vamos a contar el porqué.
Una de las cosas más importantes para cualquier usuario es tener todos los archivos que necesita cuando los necesita y es aquí donde todo tiene que funcionar a la perfección.
Google Drive no me deja descargar mis archivos ¿por qué?
Todo el mundo que tiene una cuenta de Gmail sabe, o al menos debería, que tiene en sus manos la posibilidad de utilizar un sistema de aplicaciones ofimáticas con las que ser capaz de general y editar todo tipo de documentos que no utilices el día a día de tu trabajo. Son muchas las herramientas que tienes a tu disposición, pero probablemente es Google Drive la que más te puede ayudar cuando se trata de almacenar todo tipo de datos y disponer de ellos donde cuando lo necesites.
El problema es que en ocasiones el sistema no funciona como debería y no puedes obtener esos archivos en tu dispositivo. Por eso vamos a echar un vistazo a cuáles son los problemas más habituales por los que Google Drive no te deja descargar un archivo.
Poco espacio en tu dispositivo
El típico problema de cualquier usuario con un ordenador o teléfono inteligente es que tienen una memoria limitada. Puede que incluso te hayas gastado tus euros en un dispositivo de grandes características, pero el problema está en que si no tienes espacio suficiente en el aparato te puedes olvidar de que Google Drive descargue los archivos en él.
La respuesta ante esta situación es y clara, ya que tendrás que prescindir de otros archivos o aplicaciones que tengas en el terminal para que puedas descargar los nuevos. Todo dependerá del tamaño y es realmente raro que tengas que quitarte alguna aplicación para descargar datos de tu nube.
Fallos en la conexión
Puede que pienses que todo está funcionando correctamente cuando navegas por Internet y el problema más común cuando no puedes descargar un archivo, ya sea desde Google Drive o desde la propia Red es que se produzca un fallo de conexión.
Aquí deberás tener en cuenta la cobertura que tienes disponible con tu tarifa de datos si es que descargas esos archivos desde el móvil, o incluso la del WiFi si estás en casa y dónde tienes que revisar que el router ofrece la mejor conexión posible para la descarga. Ten en cuenta que si el archivo es muy pesado y la cobertura es deficiente es posible que el propio programa tome la decisión de cancelar la descarga por ti, algo que tendrás que solucionar cuando tengas una mejor cobertura.
El navegador no funciona
Aunque no te lo creas no todos los navegadores funcionan correctamente cuando se trata de utilizar Google Drive. Y es que hay algunos que por alguna razón no funcionan correctamente. Si este fuera el caso, la mejor solución sería cambiar la aplicación desde la que estás trabajando, aunque si realizas tus labores de descarga desde una tablet o teléfono móvil lo mejor es que realices esta acción directamente desde la aplicación de Google Drive.
El archivo no está
Esto también puede pasar sobre todo si trabajas de manera colaborativa con otros usuarios. Puede que no tengas actualizada la carpeta que estás utilizando con otras personas para trabajar sobre los archivos comunes y por alguna razón alguno ha desaparecido.
Si utilizas el navegador para echar un vistazo al contenido de las carpetas, puede que este no sea ya refrescado con la última información y que intentes descargar un archivo que aparentemente está ahí pero en realidad ha ido a la papelera.
Aquí tendrás que comunicarte con tu equipo si ese fuera el caso aunque si solo eres tú el que trabaja con esa carpeta echa un vistazo a la papelera de reciclaje para comprobar que está ahí todo el contenido que necesitas y que por error has eliminado.