Que nuestro smartphone se ha convertido en una herramienta imprescindible para nuestro día a día no es ningún secreto para nadie. Pero, ¿sabías cuál es la parte que más batería gasta? ¿Y cómo puedes reducir su consumo? Te contamos todos los detalles.
Desde que el smartphone se convirtió en un indispensable en nuestro día a día, las cuestiones relacionadas en torno a la autonomía han sido una constante. A medida que los teléfonos móviles inteligentes han ido incorporando nuevas funciones, la autonomía ha sido una de las grandes damnificadas. Actualmente, la mayoría de los smartphones del mercado tienen una duración que, de manera muy aproximada, se sitúa entre el día y medio y los días, en función de nuestro uso.
Pero, ¿por qué nuestro teléfono móvil gasta tanta batería? ¿Cuál es la parte de nuestro teléfono que obliga a realizar este gasto? Te respondemos a estas y otras muchas preguntas para que puedas optimizar al máximo la duración de la batería de tu smartphone.
La pantalla, la clave
Cualquier smartphone actual tiene un elemento principal que nos permite interactuar con él: la pantalla. A través de ella, llevamos a cabo todas las acciones: respondemos correos electrónicos, enviamos mensajes, hacemos videollamadas con nuestros amigos, familiares o compañeros de trabajo, etc.
Durante los últimos años, hemos visto una transición de pantallas pequeñas y de baja resolución a grandes paneles de alta definición, capaces de mostrar millones de colores, soportar altas tasas de refresco elevadas y ofrecer una respuesta táctil que nunca antes hubiéramos imaginado. A medida que las pantallas han mejorado en calidad y capacidades, es natural que requieran de un mayor consumo energético y, como consecuencia, la batería es la principal afectada.
Las pantallas más actuales se caracterizan por, entre otros muchos motivos, su capacidad para ofrecer una excelente experiencia de usuario. Pero, pese a ello, es importante que conozcas que existen algunos consejos que pueden ayudarnos a tratar de alargar la autonomía de nuestro dispositivo.
Cómo reducir el consumo
Como ya hemos mencionado, hay varias medidas que, como usuarios, podemos emplear para minimizar el consumo de energía de la pantalla y, por ende, extender la duración de la batería de nuestros dispositivos:
- Reducir el brillo de la pantalla: Mantener el brillo en un nivel cómodo, pero sin llegar a su punto más alto, puede disminuir significativamente el consumo de energía. Muchos dispositivos incluyen un ajuste de brillo automático que adapta el nivel de brillo según las condiciones de iluminación, optimizando el uso de la batería al máximo.
- Reducir el tiempo de espera de la pantalla: En la mayoría de los terminales encontramos la posibilidad de configurar el tiempo de espera desde que dejamos de usar el dispositivo hasta que este se bloquea. Configurar la pantalla para que se apague más rápidamente después de un período de inactividad puede traducirse en un importante ahorro extra.
- Hacer uso de los modos de ahorro de batería: La mayoría de los smartphones modernos incluyen modos de ahorro de batería que, entre otras cosas, reducen el brillo de la pantalla y limitan la tasa de refresco. Dos aspectos que pueden extender la vida útil de la batería cuando sea necesario.
Mejorar la autonomía
A nivel general, podemos confiar en otras medidas que se pueden tomar para mejorar la duración de la batería del dispositivo:
- Optimizar el uso de tus apps: Algunas aplicaciones consumen más energía que otras, especialmente aquellas que utilizan servicios de ubicación, ejecutan tareas en segundo plano o se actualizan con frecuencia. Revisar y limitar el permiso de estas aplicaciones puede ayudar a reducir el consumo de batería. Por ejemplo, podemos solicitar que las apps únicamente identifiquen nuestra posición cuando hacemos uso de ellas.
- Actualizar el software: Mantener el sistema operativo y las aplicaciones actualizadas puede ayudar a mejorar la eficiencia energética del dispositivo. Aunque, eso sí, tenemos que esperar a las versiones oficiales, no a las versiones beta.
- Evitar temperaturas extremas: Exponer el teléfono a temperaturas muy altas o muy bajas puede afectar negativamente la vida y el rendimiento de la batería. Es recomendable mantener el dispositivo en un ambiente con temperaturas moderadas.
