Las enfermedades neurodegenerativas son de ese grupo que nadie quiere tener cerca ni sufrir en algún momento de su vida. Por lo general suelen aparecer conforme la edad avanza pero algunas de ellas aparecen de manera inesperada y saber actuar frente a ellas es vital para por lo menos tener una vida lo más cómoda posible. Por eso son muchas las prácticas que se están llevando a cabo para trabajar con el Alzheimer y recientemente se ha encontrado un tratamiento que podría utilizarse como tratamiento de esta enfermedad además de la esquizofrenia.
Son muchos los investigadores que buscan la forma más sencilla de conseguir que las personas con estos problemas pueden llevar una vida más tranquila y parece que por fin hay más posibilidades para tratar los dos problemas al mismo tiempo.
Un tratamiento de doble acción
Uno de los problemas típicos de cualquier fármaco tiene que ver con los efectos secundarios. Las diferentes compañías intentan reducir estos problemas lo máximo posible, pero es un hecho que van a seguir siendo parte del desarrollo de cada una de las posibles soluciones al tratamiento de una enfermedad. Sin embargo, se está buscando las posibilidades de que nuevos fármacos sean capaces de suprimir los efectos de la esquizofrenia con menos efectos secundarios.
Sin embargo, aunque el tratamiento llevaba unos años en estudio, los efectos eran demasiado fuertes y han permanecido parados hasta ahora, cuando se han encontrado mejores efectos para tratar incluso el Alzheimer. Todo está relacionado con los receptores que tiene el cerebro y son concretamente los M1 y M4, según lo que comenta Nature, los más importantes. De hecho, los últimos estudios tratan o uno u otro y lo que se busca es que tenga más efectos positivos que secundarios haciendo hincapié en el tratamiento de ambos.
Son varios los tratamientos que se están llevando a cabo para encontrar respuestas directas al uso de fármacos que a día de hoy intentan tratar las dos afecciones de manera simultánea. Y es que en los últimos estudios realizados con un fármaco llamado KarXT se ha encontrado una posible respuesta con esta variable positiva. Al parecer, entre un 11 y un 18% de los participantes con esquizofrenia han dejado el tratamiento por los efectos secundarios, lo que apunta a que todavía hay mucho camino por recorrer cuando se trata de enfermedades neurodegenerativas de este calibre.