Cada presidente del gobierno de un país necesita un vehículo privado para desplazarse de un lado a otro, ya sea tanto dentro como fuera del propio país. Estos medios de transporte no solamente tienen que garantizar que el mandatario llegue lo antes posible a su destino, sino también de la manera más segura hasta el punto de considerarse casi como un búnker en el peor de los casos. Pero hoy no hablamos de un elemento que se queda en tierra precisamente sino del Air Force One, el avión del presidente de los Estados Unidos de América.
Probablemente, estas últimas líneas te habrán recordado a alguna mítica película de cine con este título, pero lo cierto es que vamos a hablar de toda la tecnología que incorpora esta aeronave que podría pasar por un avión comercial de no ser por el diseño que tiene en el fuselaje.
Un Boeing 747 al servicio de la presidencia americana
Para las personas importantes tanto de negocios como a nivel político les importa llegar pronto a los sitios y para eso necesitan en ocasiones la utilización de un avión privado para ello. En la mayoría de los casos no se necesita más que una aeronave tipo jet con el espacio justo para unos pocos tripulantes y dos pilotos, pero si hablamos del SAM 27000 lo hacemos de una excepción en toda regla.
Probablemente por este nombre no lo reconozcas y es que estamos hablando de nada menos que el Air Force One. Junto a la bestia se trata de uno de los vehículos más importantes del mundo, aunque en este caso hablamos del transporte por aire que utiliza el presidente de los Estados Unidos para moverse al resto de países lejos de su territorio nacional.
Actualmente, estamos hablando de un avión que tiene nada menos que 19,3 metros de alto incluyendo y la parte más alta de la cola y 76 metros de largo, por lo que podría pasar por un avión comercial de gran capacidad. Tanto es así que en total tiene una capacidad de 96 personas entre los que se incluyen 26 tripulantes y 70 pasajeros.
Como curiosidad, dispone de algunos de los motores más potentes del momento capaz de alcanzar los 1.050 km hora y una altitud de 45.000 pies. Todo esto con una capacidad de 12.550 km de autonomía que por si fuera poco podría aumentar gracias a su sistema de reabastecimiento en vuelo.
Un avión que ha costado 660 millones de dólares
Si todo esto ya te parece mucho a la hora de conocer el avión del presidente de los Estados Unidos de América probablemente cuando te hablemos de tecnología esto te puede sorprender. Y es que el Air Force One dispone de un sistema con el que cualquier persona puede llamar por teléfono utilizando los 85 equipos distribuidos por toda su estructura.
Por fuera todas las ventanas son blindadas y por si fuera poco su fuselaje es capaz de soportar hasta un ataque nuclear lanzado desde tierra. También tiene su propio sistema de contramedidas colocado en la parte inferior de su estructura, el cual dispone de un sistema de bengalas capaces de evitar los misiles antiaéreos además de un sistema de torretas láser que podrían eliminarlos. Además, cuenta con un blindaje capaz de resistir ataques electromagnéticos que pudieran comprometer la electrónica del aparato en pleno vuelo.
El Air Force One también está concebido como un avión en el que se puede hacer prácticamente de todo, y no exageramos. Como era de esperar, dispone de un sistema de persianas automáticas que pueden ayudar a conciliar el sueño del presidente cuando esté en la sección del dormitorio y necesite descansar aunque también pueden usarse mientras está en el baño o en el gimnasio. Pero no todo va a ser confort y bienestar, ya que se dispone de una sala de reuniones lo suficientemente amplia para no solamente mantener una reunión in situ con las personas importantes que estén en el interior sino también mediante videoconferencia gracias a toda la tecnología de telecomunicaciones que tiene en su interior gracias a uno de los 19 televisores que también hay en su interior.
Pero por si fuera poco la tecnología de esta aeronave no solamente está en lo avanzado que es el instrumental de vuelo los sistemas de defensa o todas las capacidades que tiene para trabajar en su interior, sino que también dispone de un centro médico completo con todo el equipamiento necesario para realizar todo tipo de intervenciones que fueran necesarias en el momento.
Por desgracia estos son solo algunos de los detalles que tiene el avión más conocido del mundo, ya que algunos elementos permanecen en secreto por razones obvias. Lo que no es información clasificada ha sido su coste de nada menos que 660 millones de dólares y lo que cuesta mantenerlo en vuelo una hora que es aproximadamente unos 52.000 euros.