La carrera por conseguir una fuente de energía limpia, potente y segura está llegando a un punto muy interesante. Muchos países apuestan por invertir sus recursos en conseguir que las energías renovables sean el futuro en este sentido, investigando formas de hacer que sea mucho más eficientes. Otros apuestan más por la innovación, algo que puede ayudar y mucho a encontrar nuevas vías para generar energía. Por eso llama tanto la atención el reactor nuclear HL-3 de China con el que pretende sacar energía limpia y sin límites con un proceso similar al de tener un Sol en la Tierra.
El gigante asiático ha logrado dar un paso adelante en el mundo de la energía nuclear y la prueba de ello es lo que han denominado como sol artificial que genera reacciones nucleares de nada menos que 15 millones de grados centígrados.
Un camino hacia la fusión nuclear
Escuchar estas dos palabras juntas puede ser un gran problema para muchos. La energía nuclear suena a muchos como un problema importante para la salud de las personas, especialmente por los residuos que se generan derivados de esta. Esto por no hablar de la mala fama que tiene atribuida a problemas en las centrales nucleares, entre lo que destaca sobre todo el caso de Chernobyl. Sin embargo, esto no ha frenado las intenciones de muchos investigadores que han buscado nuevas formas de maximizar beneficios y reducir los riesgos.
En China tienen claro que si quieren estar a la cabeza del sector energético mundial sus esfuerzos van en la dirección de la energía nuclear. Bien utilizada, puede ser la mejor opción para abastecer de electricidad a un país entero, pero para eso es necesaria una gran infraestructura. En este sentido, su última aportación es el reactor HL-3.
Esta es la abreviatura de Hualiu 3 y ha logrado un nuevo hito en el proyecto de la fusión nuclear. Puede que por el nombre pienses que es el típico sistema de turbinas que funcionan con el vapor de agua que desprende el calor del sistema nuclear, pero lo cierto es que este funciona de manera distinta. Estamos ante lo que han denominado un ‘sol artificial’ creado gracias a la fusión nuclear dentro de un reactor clase tokamak con el que se puede guardar el plasma generado mediante campos magnéticos para garantizar la seguridad del aparato. Los núcleos de hidrógeno se emplean para este procedimiento, generando reacciones y altas temperatura de las que obtener energía casi ilimitada.
Pero ¿por qué es tan importante?
Puede que todo esto te llame la atención por ser un proyecto importantísimo a nivel energético. No siempre podemos hablar de confinar la energía de una estrella en un contenedor, pero lo cierto es que hay grandes avances y mejoras de las que el mundo de la energía nuclear sacará partido. Es importante destacar que el este reactor estará operado por 17 laboratorios de todo el mundo y los avances que se obtengan del HL-3 tendrán una repercusión capital en el ITER.
Ya te hemos hablado alguna de vez de este reactor, el cual se beneficiará del gran aporte que supone generar un campo magnético capaz de sostener toda esta temperatura y generar energía de manera segura y prácticamente infinita. El HL-3 ha demostrado que colocar electroimanes en puntos clave es importante para una gestión correcta de la energía.
Aun con todos estos datos sobre la mesa, es importante destacar que la seguridad es una de las prioridades para los científicos a cargo de los dos reactores. En el caso del ITER, China se ha comprometido a la creación de una cámara de vacío con la que garantizar la seguridad del proyecto si hubiera problemas. De momento, llegar a este punto es algo poco probable, ya que la Experimental Advanced Superconducting Tokamak (EAST) sigue apostando por el uso responsable de estos aparatos que, a día de hoy, solo han producido la energía justa y necesaria y no más allá de los límites establecidos. Veremos cómo avanza la ciencia en este camino por buscar una fuente de energía cada vez más eficiente, ilimitada y segura para todo el mundo.