En el mundo de la tecnología no solamente es importante encontrar novedades utilizando los métodos más avanzados, también se debe hacer todo lo posible por encontrar nuevas aplicaciones a los elementos que ya existen para explotar su máximo potencial. Ninguna de las dos tareas es fácil pero lo cierto es que el ingenio humano no tiene límites como han demostrado estas pantallas hechas con píxeles magnéticos.
A diferencia de las pantallas que utilizan elementos luminosos para mostrar los diferentes colores de una imagen, esta pantalla funciona gracias a imanes que son capaces de cambiar el color de lo que hay en pantalla con el fin de encriptar mensajes.
Una nueva forma de ocultar información con imanes
Cada vez es más difícil encontrar una solución a las pantallas que utilizamos a día de hoy. Estamos acostumbrados a que estos elementos son sólidos y muy frágiles, lo que influye en gran medida a que otros dispositivos puedan mejorar. Uno de los ejemplos más claros los tenemos gracias a los teléfonos plegables, los cuales utilizan una tecnología con la que es capaz de montar en un chasis que se pliega sobre sí mismo una pantalla lo suficientemente flexible como para que no presentes desperfectos con el uso. Sin embargo, en la Universidad de Michigan están buscando otra manera de crear pantallas plegables o por los menos flexibles mediante el uso de imanes.
Como puedes ver en el vídeo anterior, los investigadores utilizan unos píxeles magnéticos que son capaces de mostrar información en la pantalla a través de su reacción ante otro imán que es el que tiene la información. En esencia, están hechos de lo que se conoce como partículas magnetoactivas Janus (MAJP) que tienen propiedades diferentes. Para este proyecto, se ha utilizado bicompartimentales compuestas de micropartículas ferromagnéticas de neodimio, otras con nanopartículas superparamagnéticas de óxido de hierro y todo introducido en un compartimiento con pigmento de óxido de titanio.
Pero el experimento no acaba aquí. Para hacerlo funcionar, se necesita un sistema con el que se pueda ‘apagar y encender esta característica y por este motivo se necesita un campo electromagnético que lo reactive. Gracias a un proceso de polarización de los campos magnéticos es posible revelar la información que envía un dispositivo y que se queda reflejado en la pantalla que contiene estos pequeños imanes.
Es importante destacar que para este procedimiento hemos hablado de los imanes de neodimio, considerados como unos de los más potentes del mundo, por lo que el pulso que se emite con el fin de revelar la imagen enviada es lo suficientemente potente como para que el imán cambie de color
Inspirado en la naturaleza
Puede que teniendo en cuenta los elementos que te contábamos antes, mostraros una idea de la increíblemente curioso que es el uso de imanes para encriptar mensajes de todo tipo. Sin embargo, el método utilizado no difiere mucho de algunas de las características que tienen los animales en la vida real.
Y es que la forma que tiene de actuar esta pantalla con imanes recuerda mucho a la del sistema de camuflaje que tienen los pulpos o los calamares que son capaces de adaptarse a las situaciones ambientales haciendo que su piel se mimetice por completo con los colores del suelo o la superficie que están tocando convirtiéndolos en los depredadores de lo más temibles.
Por suerte, esta característica no es tan letal para el ser humano, ya que la intención es la de guardar mensajes y activar los de tal forma que los imanes cambian el color para mostrar su contenido real.