¿Alguna vez se te ha quedado el ordenador sin responder y no has sabido cómo solucionarlo? Por suerte, Windows 11 incorpora un sistema que nos permite, ante cualquier situación similar, poder volver a tener el control de nuestro equipo: se trata del reinicio de emergencia y, a continuación, te contamos todos los detalles.
En función de las especificaciones de nuestro equipo, y de los programas y las aplicaciones con las que estemos interactuando de manera simultánea, es posible que en algún momento nos hayamos encontrado ante la tan temida situación de que nuestro ordenador haya dejado de responder. Quedándose en un estado similar a como si estuviera congelado.
En la mayoría de las ocasiones, todos conocemos la opción de recurrir al tan conocido atajo de “control + alt + suprimir”. Una solución a tener en cuenta para poder invocar al Administrador de Tareas y, desde él, poder forzar el cierre de aquellas aplicaciones o procesos que están causándonos los problemas. Sin embargo, ¿qué ocurre cuando no podemos forzar la detención del proceso en cuestión? En Windows 11 podemos encontrar la solución a este escenario: el reinicio de emergencia. Una posibilidad que puede no resultar muy conocida, pero que nos ofrece interesantes ventajas en esos momentos en los que nuestro PC deja de responder a cualquier orden. Te contamos todos los detalles.
Cómo utilizar el reinicio de emergencia
Al contrario que en la mayoría de atajos que conocemos, en este caso interviene, además del teclado, la propia tecla de encender y apagar nuestro equipo. Para poder utilizar este sistema, debemos acceder al administrador de tareas pulsando la ya mencionada combinación de “Ctrl + Alt + Supr”. Acto seguido, tenemos que mantener pulsada la tecla de “Control” y, a tras ella, pulsar el botón de apagar nuestro ordenador al mismo tiempo. Una vez ejecutada la secuencia, veremos como en nuestra pantalla aparece un mensaje que nos informa que si realizamos el reinicio, todos los datos que no hayamos guardado se perderán, sin posibilidad de volver a recuperar los mismos. Por tanto, debemos utilizar este sistema únicamente como última opción, si cualquier otra alternativa no funciona.
Que nos encontremos ante un fallo en alguna de las aplicaciones que hemos utilizado recientemente en nuestro ordenador no es muy habitual, especialmente si tenemos instaladas las últimas actualizaciones de nuestro sistema. No obstante, si surgen, es recomendable que tratemos de encontrar cualquier otra alternativa antes de acudir al reinicio de emergencia, puesto que toda nuestra información se perderá, como ya hemos mencionado previamente. En muchos casos, nuestro equipo únicamente necesita de un extra de tiempo para terminar de configurar todos los procesos que está acogiendo al mismo tiempo.
Cuándo deberíamos utilizar el reinicio de emergencia
Existen muchos escenarios en los que el reinicio de emergencia puede ser muy útil. Más allá de que el equipo no responda, que suele ser una situación en la que no tenemos mucha otra opción, existen otros motivos que pueden llevarnos a utilizar este recurso. Te contamos algunos de los principales:
- Aplicaciones congeladas: Podemos encontrarnos con el caso de que nuestro equipo funcione, pero una aplicación se haya quedado colgada e interfiere en el resto del sistema. Impidiendo que podamos interactuar con él, pero dejándonos sin posibilidad de poder cerrar la app. En este caso, es una de las mejores opciones.
- El sistema funciona muy lento: En muchas ocasiones, no es necesario que nuestro ordenador deje de responder para poder utilizar el reinicio de emergencia. Existen situaciones en las que el sistema funciona más lento de lo que debería y, cuando esto se produce, el reinicio de emergencia puede ser uno de los mejores recursos que nos podemos encontrar.
- Saturación de aplicaciones: Cuando nos descargamos varias aplicaciones al mismo tiempo o queremos abrir un conjunto de ellas de manera simultánea, es probable que nuestro ordenador se resienta. Si notamos como nuestro ordenador no reacciona a nada, deberemos valorar el uso de este recurso.