Nuestros smartphones y tablets son, sin lugar a dudas, el centro neurálgico de nuestra vida diaria. Mensajes, fotos, comentarios, vídeos, juegos, noticias, trabajo… Es inevitable que acabemos acumulando datos importantes en ellos.
Algunos de estos datos son tan cruciales que es necesario guardarlos en un ordenador para tratarlos o conservarlos, pero ¿es tan sencillo? La verdad es que sí. Hoy en día contamos con muchas opciones perfectas para compartir archivos usando cable, internet u otros soportes.
Copiar archivos mediante cable
La opción más básica y “asequible”. Tan solo tendremos que usar el cable de carga USB que incluyen la gran mayoría de tablets o smartphones del mercado para conectarlo a un PC y comenzar a copiar los archivos.
Podemos configurar esta conexión, en las versiones más recientes de los sistemas operativos Android, como conexiones para compartir solo fotos, archivos en general, o para usar el dispositivo como instrumento musical MIDI.
Eso sí, tienes que tener el cable a mano y cargar con él, aunque parezca absurdo pensarlo, a veces es un engorro o dificultad (sobre todo si no estamos en casa o en nuestro equipo).
AirDroid
Aunque después hablaremos de soluciones inalámbricas, la aplicación AirDroid merece un apartado propio. Esta aplicación interconecta inalámbricamente tu smartphone o tablet y tu ordenador.
Tras ello, podrás, no solo compartir archivos (que es la más importante de sus funciones), si no gestionar todo tipo de configuraciones en tu dispositivo móvil desde tu ordenador: mensajes, contactos, fotografías, vídeos, llamadas, batería… Es la herramienta más útil que existe actualmente para controlar tu smartphone o tablet de forma remota.
Usar la nube
El nuevo método más eficaz es sin duda usar la nube como lugar para compartir archivos, ya sean fotografías, o documentos personales, pero en realidad podemos hablar de cualquier tipo de archivo. Hay muchos: Google Drive, Dropbox, MEGA, BOX…
Ya hemos hablado sobre algunos servicios que incluso nos permiten conectar directamente a nuestro disco duro externo y otros que nos permiten subir fotos ilimitadamente, pero la lista de plataformas real es inmensa.
Comparte archivos por WiFi
Otro método es usar la conexión WiFi para compartir archivos entre un smartphone o tablet y un ordenador. Es una forma sencilla que elimina la necesidad de usar cables y aprovecha recursos tan comunes hoy en día como una red WiFi local.
Aplicaciones como WiFi File Transfer permiten crear una especie de servidor local FTP en tu propio dispositivo móvil al que acceder mediante un ordenador (u otros dispositivos) con tan solo introducir la dirección resultante en un navegador web y gracias a ello descargar archivos e incluso subir nuevos.
Comparte archivos mediante Bluetooth
Otro de los métodos más antiguos y más eficaces: compartir archivos de forma inalámbrica aprovechando la conexión Bluetooth del smartphone o tablet y la posible conexión Bluetooth de tu equipo informático (no todos cuentan con ella, pero incluso pueden adquirirse adaptadores Bluetooth por poco dinero). Aun así hemos de aclarar que no es la más veloz de las conexiones para compartir archivos.
Tan solo tendremos que emparejar los dispositivos usando el gestor de conexión Bluetooth tanto de Android como de Windows para completar con éxito la comunicación, a partir de aquí todo el proceso de transferencia de datos debería funcionar sin mayor problema.
Usa memorias externas o tarjetas microSD
Otro método no menos útil es el de usar una memoria externa mediante el puerto microUSB del smartphone o tablet. Esto lo podemos realizar con adaptadores OTG, que permiten conectar a nuestro dispositivo Android cualquier memoria USB o periférico externo que use USB. También existen memorias con conectores micro USB preparadas para usarse en smartphones o tablets.
También podemos emplear el uso de tarjetas microSD para copiar archivos voluminosos (si el smartphone o tablet permiten leer estas tarjetas) y un adaptador o lector de tarjetas para ordenadores (casi todos los portátiles cuentan con uno).