Intel® es un fabricante destacado dentro del mundo de los procesadores y chipsets para ordenadores de sobremesa, portátiles y otros dispositivos informáticos. Lenovo confía en la calidad por encima de cualquier otro aspecto, y por ello todos sus equipos montan este tipo de procesadores.
Por supuesto, conocer la categoría de los propios procesadores es importante para obtener unos resultados adecuados. Los nuevos procesadores Intel® se dividen en varias series distintas que van desde los Intel® Core™ M, perfectos para ultrabooks, a los Intel® Core™ i7, Intel® Core™ i5, Intel® Core™ i3, la mejor elección en cuanto a rendimiento.
La evolución de los procesadores Intel®
Desde hace siete años, todos los procesadores habituales de Intel® se han denominado Intel® Core™ iX, subdividiéndose en tres categorías, i3, i5 e i7, que especifican su potencia y uso final según su denominación.
En siete años hemos conocido seis generaciones de procesadores Intel® Core™, contando en cada relevo con una microarquitectura de CPU distinta que recogía lo mejor de la anterior, la potenciaba y la comprimía aún más en cuanto a tamaño de forma progresiva.
Teniendo esto en cuenta, cada año hemos visto nuevas microarquitecturas y evoluciones de cada una, siguiendo el modelo Tick-Tock de Intel®, denominadas Nehalem, Sandy Bridge, Ivy Bridge, Haswell, Broadwell y la reciente Skylake, así como tamaños de fabricación que van de los 45 nanómetros de los Nehalem a los 14 actuales de los Skylake.
Es realmente admirable contar con procesadores mucho más reducidos en tamaño, pero con una potencia increíblemente mayor que los homónimos de años atrás, el problema surge cuando queremos aplicar estos procesadores a ordenadores de nueva generación y diseño exigente: los ultrabooks.
Intel® Core™ M, punto y seguido en la carrera de la eficiencia
Las exigencias de los nuevos tiempos han traído consigo productos mucho más portátiles de lo que estamos acostumbrados a ver normalmente en informática. Los smartphones y las tabletas son un buen ejemplo, pero es interesante poder contar con equipos que brinden un nivel de potencia mayor ofreciendo precisamente las ventajas del diseño de un smartphone o tableta.
Intel® pensó que era hora de ampliar su línea de productos y presentó la nueva categoría denominada Intel® Core™ M, unos procesadores pensados para equilibrar potencia y eficiencia y poder integrarse en dispositivos reducidos.
La fabricación de procesadores usando 14nm de tamaño ha sido la gran “excusa” para traernos los Intel® Core™ M desde la 5ª generación de procesadores Intel® Core™ (denominada Haswell) en adelante.
Además, podrá usarse incluso en ultrabooks que no usen más de 9 mm de grosor e incluso carezcan de ventiladores.
Pero no olvidemos que la gran baza de estos procesadores son su eficiencia: Un procesador Intel® Core™ M es hasta un 50% más eficiente que un procesador Intel® Core™ i5 de su misma microarquitectura.
Para que quede más claro, el Thermal Design Power, que indica el consumo final de un procesador, pasa de los 15W de mínimo en un procesador Intel® Core™ a tan solo 4,5W de mínimo y máximo en un Intel® Core™ M. La batería durará hasta dos veces más que en un dispositivo que use un procesador convencional.
Skylake, mejorando gracias a la 6ª generación
La nueva generación de procesadores Intel® Core™, la sexta, ya está entre nosotros. La nueva microarquitectura Skylake se organiza en categorías de una forma mucho más precisa, según el cometido final que queramos darle a cada procesador, así que vamos a conocer una a una cuáles son y para qué podríamos usar las series de procesadores Skylake:
Aquí encontramos los procesadores Intel® Core™ M, que se pueden encontrar bajo las denominaciones Core™ m3, Core™ m5 y Core™ m7, según su potencia. Los nuevos Intel® Core™ aumentan la autonomía hasta las 10 horas y el rendimiento en un 40% más de lo visto en la anterior generación. Su Thermal Design Power no se mueve de los 4,5W. Estos procesadores irán incluidos en ultrabooks, tablets o micro-ordenadores, como los de la gama Lenovo Yoga Pro.
Si pasamos a esta serie, encontraremos procesadores Intel® Core™ con denominaciones Intel® Core™ i3 e Intel® Core™ i5. Aquí contaremos con GPUs integradas Intel HD Graphics 520 o Iris HD Graphics 540 y un Thermal Design Power de 15W. Se añaden modelos avanzados con 28W de Thermal Design Power, gráficos Iris Graphics 550 y soporte para memorias DDR4, pensados para equiparse en portátiles ultraligeros de altas prestaciones. Estos procesadores irán incluidos en ultrabooks o portátiles, como el Lenovo ThinkPad E550.
En la serie H contamos con Intel® Core™ i5 e Intel® Core™ i7 como máximos exponentes. Estos procesadores están destinados, sobre todo, a gamers, ya que incluyen GPUs Intel Graphics 530, instrucciones más especiales, mayores frecuencias de procesado y un tope de 45W de Thermal Design Power. Estos procesadores irán incluidos en portátiles o equipos de sobremesa, como el Lenovo ThinkCentre M83 SFF Pro.
Aquí encontraremos procesadores que se diseñan, generalmente, para usarse en equipos de sobremesa de máxima potencia. Los Intel® Core™ i7 son los únicos “habitantes” de esta serie, como podemos ver en el Ultrabook Lenovo ThinkPad X1 Carbon que cuentan con funciones de overclocking desbloqueadas y, además, alcanzan los 91W de Thermal Design Power. Estos procesadores están diseñados para equipos de sobremesa y portátiles de muy alta gama.