Pese a que muchos se niegan a reconocerlo España es la cuna de algunos de los inventos más importantes a nivel internacional. y es que da igual el segmento al que se hayan dedicado ya que para muchos usuarios ha supuesto un gran cambio en sus quehaceres diarios hasta el punto de mejorar en comodidad e incluso en velocidad cuando se trata de realizar ciertas tareas. Y es precisamente el mundo de la hostelería el que le debe a José Álix Martínez la creación de la olla a presión.
Tal vez no te lo esperabas, pero como ocurre con otros inventos, este caso es de esos en los que ha sido un registro el que el ha atribuido la invención a nuestro protagonista. Eso sí, con razón.
Denis Papin, una parte importante de la intención
Cuando hablamos de la olla express hablamos de uno de los inventos más importantes que a día de hoy son necesarios en cualquier cocina profesional y también en muchos hogares. Pero aunque la olla a presión fue inventado por un industrial malo, parte del invento se lo debemos a Denis Papin. Él era un inventor de origen francés cuyo invento tenía una clara orientación científica. No podemos decir que la idea de tener un aparato para convertir los huesos en gelatina para investigarlos mejor no sea de gran importancia para el mundo de la ciencia, pero lo cierto es que su uso en el mundo de la cocina tampoco tenía mucha relevancia en 1679.
Con el paso de los años también se hicieron otras versiones que aunque parecían más avanzadas eran verdaderos armatostes que no podrían ser utilizados en una cocina convencional. Esto supuso que el proyecto quedara relegado prácticamente al olvido, al menos hasta que apareció nuestro protagonista en escena en los inicios de los años 1920.
Él era militar y lo más probable es que ya fuera conocedor de todos estos avances de este mundo, y lo más probable es que gracias a toda esta información tuviera la posibilidad de crear el dispositivo que a día de hoy no falta en ninguna cocina profesional ni tampoco en muchas domésticas.
El gran aporte de Álix
Como te hemos dicho, nuestro protagonista estudió algunos de los diseños anteriores, pero su aportación al mundo de la cocina es realmente importante gracias a la patente que él mismo denominó con el nombre con el que se le conoce a día de hoy: Olla Express. La idea presentada y registrada era la de un recipiente que fuera capaz de cocinar alimentos con agua en su interior, valiéndose de las teorías del uso de vapor para generar calor en su interior y así cocinarlos.
Pero en su sistema tiene un aporte mucho mayor que hace más fácil su utilización. Para empezar el diseño es mucho más fácil de transportar, algo que hacía mucho más sencillo que no solo se pudiera llevar la comida de un lado a otro, sino que también se podía guardar con el resto de utensilios de cocina. Por otro lado, tenía una cosa que diferenciaba una herramienta de cocina de una bomba y eso era su sistema de cierre.
Puede parecer que no, pero esta característica hizo que el aparato fuera más seguro porque disponía de un sistema que permitía sacar el vapor del interior de manera mucho más segura sin que esta explotase por un exceso de vapor en su interior.
Adicionalmente, y a modo de curiosidad, añadió una de las mejores cosas con las que se puede ofrecer algo tan novedoso y eso es un accesorio imprescindible para cualquier amante de la cocina que no es otro que un libro con nada menos que 360 recetas escritas por el propio Álix para usar su invento.
A día de hoy el sistema es mucho más novedoso y seguro, haciendo que sea posible que cualquier persona sea capaz de utilizarla sin miedo a recibir cualquier tipo de daño incluso en el hipotético caso de que este aparato sufra una sobrecarga.
