Uno de los grandes problemas a los que se encuentran los conductores de hoy en día es el paso del motor de combustión al eléctrico. Es verdad que los fabricantes ven más el futuro eléctrico, pero se encuentran con que la autonomía no es la adecuada. Pero parece que eso estará por cambiar muy pronto con baterías de hasta 1.500 km.
Puede que este tipo de pilas sean la gran solución para que cada vez más compradores tengan claro el futuro de eléctrico. Eso por no hablar de cómo serán de compatibles con las nuevas tecnologías que en el futuro ofrecerán más opciones de carga.
Toyota en pleno proceso de revolución de baterías
Las baterías se han convertido en un objeto más que necesario para todos los elementos electrónicos disponibles. Si buscas un ordenador, una tableta o un smartphone estos llevan una integrada, y si tienes un coche eléctrico tienes que saber que en vez de un tanque de gasolina dispone de una gran batería que hace que el motor se mueva sin contaminar.
El problema es que estas baterías no tienen una autonomía lo suficientemente importante como para que los usuarios se sientan cómodos para hacer largos viajes. Por ejemplo, un coche de combustión de tipo utilitario puede ofrecerte una autonomía de hasta 630 km con el depósito a tope, algo que se queda atrás en el caso de los coches eléctricos que apenas superan los 400 km con una sola carga.
Pero esto es algo que en Toyota están dispuestos a cambiar de aquí a unos años. Resulta que la compañía nipona ha decidido ponerse en marcha y desarrollar una batería de nada menos que de 1.500 km. La autonomía es más que generosa y dada la densidad de esta puede tardar unos 10 minutos en llenarse por completo con una carga.
Un proceso que tardará unos cinco años
No cabe duda de que Toyota ha subido la marcha con este nuevo producto y lo hace a un nivel más que interesante. Pero no estará sola en el camino, ya que contará con la ayuda de la compañía Idemitsu Kosan, la segunda refinería de petróleo más grande de Japón, para este trabajo. Puede que para muchos parezca contraproducente que una compañía petrolera se dedique al negocio de las baterías de coches, pero es que esta en concreto es una pionera del i+D en este campo.
La compañía japonesa se ha propuesto tres fases de actuación para presentar un modelo adecuado para cumplir con sus expectativas. Dichas fases buscarán la forma de que los electrolitos de una batería sean mejores en calidad y coste. Después, con un modelo de producción sólido se procederá a la realización de un modelo más grande, un prototipo que sería el que integren los coches en el futuro. Si todo esto funciona, para el 2027-2028 podríamos tener esas baterías en producción a gran escala y, probablemente, con una comercialización para otras compañías con las que aportar una gran autonomía a sus coches del futuro.
