Los drones han entrado en la escena bélica como un recurso realmente interesante para todo tipo de misiones, Por un lado, su uso como dispositivo de rastreo y reconocimiento es realmente interesante, mientras que para otros su uso en masa o enjambres supone una forma rápida y casi indetectable para provocar estragos entre las tropas enemigas. Sin embargo, en Ucrania están pensando en un método con el que sus dispositivos sean indetectables en los radares.
En un momento en el que la tecnología es tan importante, todos los avances tecnológicos pueden aportar una diferencia significativa entre ganar o perder un conflicto, especialmente si es bélico.
Una alternativa al GPS
Una de las tecnologías más importantes que ha revolucionado la vida tal y como la conocemos ha sido el GPS. Tener la posibilidad de saber dónde está un sitio y cómo dirigirte hasta él se ha convertido en una tarea realmente sencilla gracias a esta tecnología y a todas las aplicaciones que funcionan con la geolocalización tanto tuya como de estos sitios. Sin embargo, no todos ha sido tan bueno, ya que es una señal importante que puede marcar la diferencia en una guerra.
Por desgracia esto lo están viviendo en sus carnes todos los ucranianos quienes están tratando de sobrevivir ante la ofensiva rusa. El conflicto lleva varios años activo y eso ha hecho que la tecnología de combate avance y que la que se utiliza a diario deba ser protegida incluso para todos los que se encuentran en el campo de batalla. Una de ellas es el GPS, que puede servir para geolocalizar personas e incluso cualquier dispositivo dentro de un espacio aéreo.
Y justo aquí es donde entran en juego los drones, esos dispositivos que se han convertido en un elemento casi indispensable para el trabajo de muchos usuarios, pero que también ha servido como un elemento indispensable en el desarrollo de esta guerra. Por desgracia, para unos y otros estos aparatos vuelan con un sistema de GPS que puede ser interceptado para conocer su posición y desmantelarlo en caso de que sea posible aunque la compañía Sime.Engeneering ha dado con una solución para evitarlos.
La compañía ha utilizado un sistema que miden el tiempo que tarda una señal en llegar a un transmisor desde el dron y todo gracias a un módulo de comunicación instalado en el propio dispositivo. Este sistema junto a dos balizas yo no estación terrestre son capaces de conseguir que un dron vuele lejos de la señal de GPS que puede ser utilizada e intervenida por el bando enemigo.
De esta manera se logra que la tecnología gane más protagonismo en el campo de batalla y puedan operar con los drones lejos del sistema de interferencia de los dispositivos enemigos que hay en el campo de batalla y que pueden reorientar su trayectoria o incluso derribarlos para evitar problemas