Estamos acostumbrados a que todos los dispositivos electrónicos actuales funcionan gracias a Internet, lo que les ha dado la categoría de inteligentes. Y es que la posibilidad de trabajar con estos aparatos nos ha abierto un mundo de posibilidades en todos los sentidos, pero lo cierto es que todavía esta categoría se puede añadir a más cosas. Y no nos centramos solo en el mundo del pequeño y gran electrodoméstico, sino en uno más amplio como es el de las ciudades inteligentes.
Puede que muchos pensaran en que este concepto no iba a llegar nunca, pero lo cierto es que todavía hay cosas que debes tener en cuenta cuando se trata de hablar de una urbe con unos niveles tecnológicos que son envidiables.
Qué es una ciudad inteligente
Los dispositivos inteligentes son verdaderas piezas de ingeniería, ya que poner tantos sensores pequeños en un mismo sitio es meritorio, sobre todo si tenemos en cuenta que muchos de ellos caben en un bolsillo o los puedes llevar en la muñeca. La tecnología les ha dado muchas más capacidades, pero lo cierto es que este concepto es aplicable a un montón de elementos más e incluso mucho más grandes que estos.
El ejemplo más claro es el que te ponemos es el de las ciudades, el cual es a día de hoy la aspiración de muchas del mundo si no lo es ya. Lo primero de todo es darle una razón de ser, un concepto para saber delimitar qué es una ciudad inteligente y cómo categorizarla. Para eso, contamos con la ayuda de la Comisión Europea, la cual se define como “un lugar donde las redes y servicios tradicionales se hacen más eficientes con el uso de soluciones digitales en beneficio de sus habitantes y empresas.”
Elementos que hacen inteligente a una ciudad
Como puedes ver, esta definición establece una serie de elementos necesarios para establecer los límites de una ciudad inteligente, los cuales se apoyan en disponer de lo último en tecnología así como dotar a los ciudadanos de lo último en tecnología para que se sientan cómodos. En definitiva, hablamos de elementos con los que una urbe es más accesible y ofrece todas las mejoras disponibles para que todo el mundo se beneficie de ellas a nivel de seguridad, suministros y también de administración, siendo esta mucho más cercana e interactiva.
Las ciudades inteligentes no lo son porque sí. Hay diferentes elementos que hacen que estas se ganen este título y se diferencien de otras que no lo son gracias a sus inversiones para mejorar las capacidades de confort de todas y cada una de las personas que conviven en su interior. Para eso es importante hacer una gran inversión en las diferentes áreas que la conforman, las cuales podemos dividir en los siguientes elementos:
Eficiencia energética
Probablemente, este es uno de los pilares más importantes de la construcción moderna en cuanto a edificios modernos se refiere. Con el paso de los años, las ciudades han adoptado sistemas de suministro energético más modernos y han requerido que incluso los inquilinos se comprometiesen a cumplir con los diferentes estándares.
Abandonar las calderas de combustible fósil por otros sistemas para la calefacción o simplemente hacerlas más eficientes, así como la apuesta por las energías renovables con los paneles solares son elementos fundamentales.
Mayor seguridad
Aquí tenemos que entrar en un terreno conocido con elementos como es la inteligencia artificial, aunque esto es solo una parte. Además de mejorar el equipamiento de movilidad de los cuerpos de seguridad, también se requiere del apoyo de la tecnología para evitar problemas el día de mañana. La utilización de cámaras corporales y la utilización de inteligencia artificial con el fin de reconocer a un malhechor cuando este es captado por las lentes son elementos determinantes para que los usuarios se sientan seguros.
Elementos públicos inteligentes
Aquí podemos englobar diferentes elementos necesarios dentro de una ciudad. Por un lado, tendríamos el alumbrado, el cual es determinante para mantener un ambiente seguro por las calles al anochecer, siempre teniendo presente el uso de materiales más eficientes a nivel energético como nuevas luces de bajo consumo o paneles solares para ahorrar en luz por el día.
Tampoco nos olvidamos del transporte, una parte fundamental de esta ecuación. La integración de nuevos coches y autobuses más respetuosos con el medioambiente, más espaciosos, y la llegada de sistemas más inteligentes con los que apoyar el transporte autónomo también son claves para el desarrollo de una ciudad inteligente.
Las ciudades más inteligentes del mundo
Ahora que ya entiendes qué es una ciudad inteligente y cuáles son los estándares más importantes para reconocerlas, puede que te hagas la pregunta de cuáles son algunas de las ciudades más inteligentes del mundo. Evidentemente, no podemos meter a Telosa a pesar de lo interesante que es el proyecto precisamente por este motivo, porque todavía no está construida. Sin embargo, las que están ya funcionando son estas a modo de top 3 en el Smart City Index 2023:
- Zurich: la capital de Suiza está en este top gracias a que dispone de un gran desarrollo de la fibra óptica, unas mejores infraestructuras digitales y un sistema educativo y médico que poco a poco están reduciendo la brecha digital.
- Oslo: otra capital europea que está en este ranking por sus iniciativas, sobre todo por su gestión. Unos grandes avances por poner más espacios verdes y crear entornos mucho más eficientes a nivel energético han sido sus claves para colarse como una de las más destacadas.
- Camberra: pese a que muchos considerarían Sidney como la capital de Australia, sentimos deciros que esta es la smart city destacada por ser la primera en introducir sistemas de transporte centrados en la energía eléctrica, desde scooters hasta autobuses eléctricos donde es pionera.
Por si te lo estás preguntando, existen cuatro ciudades españolas que ya forman parte de este índice por sus avances tecnológicos y energéticos las cuales son Madrid, Bilbao, Zaragoza y Barcelona por orden de aparición. Esto es una gran noticia para nuestro país, precisamente por aplicar políticas mucho más sostenibles de cara al futuro para construir una sociedad mucho mejor.