Los dispositivos electrónicos están muy presentes en el día a día. Cuesta mucho no imaginarse la vida ya sin sus aportes, y uno de ellos puede que lo lleves en la muñeca. Y es que son muchos los usuarios que han apostado por comprar un smartwatch con el que controlar diferentes funciones de su teléfono o incluso de su día a día.
Debes tener en cuenta que elegir un reloj inteligente es mucho más que mirar el precio que te va a costar. Hay muchos factores determinantes que harán que te decantes por un modelo u otro y debes tenerlos en cuenta para que hagas una compra perfecta.
¿Smartwatch o smartband? no son lo mismo
Una de las cosas que debes tener en cuenta es que hay dispositivos que parecen iguales, pero no lo son. El ejemplo de los relojes inteligentes y las smartband es uno de tantos. Y es que para muchos salta a la vista cuál es la gran diferencia entre ambos modelos, aunque es verdad que a efectos prácticos más de uno tenga sus dudas.
La gran diferencia para muchos está en el diseño. Las smartband han adquirido en su mayoría una forma de pantalla alargada en la que disponer toda la información que le importa al usuario. Es cierto que cumplen con su propósito de resistencia frente a elementos y su funcionalidad, pero su composición de materiales es más limitada por lo que son menos resistentes.
Si te decantas por un smartwatch debes saber que sus características están mejoradas. Cada uno tiene una estética, pero muchos fabricantes se han decantado por diferenciarse de las anteriores con un diseño más cuadrado o incluso manteniendo el típico círculo. Como te decimos, sus materiales acostumbran a ser mejores que los anteriores e incorporan funciones más interesantes que harán incluso que te olvides de sacar el teléfono del bolsillo para contestar llamadas, por ejemplo. De hecho, hasta te lo puedes dejar en casa si es que dispone de un servicio con tarjeta SIM.
Cómo elegir el smartwatch perfecto
A la hora de comprar un reloj inteligente debes tener en cuenta muchos aspectos importantes. Es verdad que el precio suele ser un factor determinante a la hora de su adquisición, pero cuando ves sus características o especificaciones ya te puedes hacer una idea de lo que estás pagando. Conviene tener un presupuesto previo, sin lugar a dudas, pero debes tener en cuenta estos factores también si es que los necesitas.
Con o sin SIM
Ya te hemos comentado antes que algunos smartwatches tienen la posibilidad de tener una SIM integrada. Esto está muy bien para todos los que quieren tener un dispositivo con el que llamar por teléfono sin que tengas el dispositivo cerca, por lo que esta característica puede ser muy útil para estar siempre conectado aunque se te olvide el móvil en casa o en el trabajo.
La batería
Al igual que los teléfonos, la batería es un punto importante cuando te toque comprar un smartwatch. Es cierto que hay mucha diferencia entre las capacidades de ambas, pero lo cierto es que un reloj inteligente puede aguantar mucho más tiempo encendido que un móvil. De hecho, con un uso medio pueden aguantar fácilmente hasta las dos semanas o una si el uso es muy intenso con funciones deportivas.
Sistema operativo
Como sabrás, en el mercado tecnológico existen varios sistemas operativos que mueven un dispositivo. El problema que hay aquí es el ecosistema, ya que no todos funcionan igual u ofrecen las mismas posibilidades según qué marca. Por eso debes tener muy claro este punto, ya que puedes perder características según el dispositivo que compres.
Funciones
Puede que te parezca nimio considerando todas las capacidades que tiene un smartwatch, pero con cada año que pasa se añaden más novedades y más interesantes. Mejoras en la detección de la actividad deportiva, control de oxígeno en sangre, sistema de eliminación de agua cuando sumerges el aparato o avisos de estrés son algunos de los más nuevos y si quieres tenerlos en tu muñeca tendrás que afrontar el precio de lo más novedoso.
Estos son algunos puntos importantes que debes tener en cuenta a la hora de comprarte un reloj inteligente, por lo que ahora depende de ti tenerlos en consideración para hacer una compra óptima y, sobre todo, de tu agrado.