No hay ningún dispositivo que puedas llevarte contigo, que no tenga una batería conectada a él. De otra manera, sería imposible utilizarlo, ya que no se podrían funcionar. Pero esto es lo más evidente del proceso de funcionamiento y fabricación de cualquier dispositivo portátil, aunque son muchas las firmas que buscan la manera de ser más eficientes con los materiales. Uno de los más importantes tiene que ver con las baterías ya ahora se ha descubierto que hay unas bacterias que pueden ayudar a que el proceso de reciclaje sea mucho más eficiente.
Los microorganismos se encargarán de extraer los metales más raros de estos elementos, consiguiendo que la posibilidad de usarlos de nuevo sea mucho más eficiente y que se puedan utilizar de nuevo con otros productos.
Un proceso de reciclaje en el que intervienen microbios
Cada vez más empresas tienen en cuenta una máxima que es la de cuidar el medio ambiente. No hay conferencia en la que no saquen a relucir los esfuerzos que hacen por reducir la huella de carbono en el mundo y para ello es importante tener en cuenta que un proceso de fabricación eficiente no es lo único que se necesita. El reciclaje es una parte importante y cuando hablamos del campo de la tecnología es importante tener en cuenta que no solo se deben reciclar esas partes que pueden ser más sólidas, sino que se necesitan procesos cada vez más y más avanzados para sacar provecho de todos los materiales que se han usado.
Por eso llama la atención el último trabajo de un equipo de la Universidad de Edimburgo en el que han encontrado la forma de utilizar bacterias para separar los diferentes elementos de las baterías que utilizan los dispositivos más comunes como son los portátiles y los móviles. En alguna ocasión hemos hablado de todos los elementos de los que está hecho un móvil, por lo que entenderás que es más que importante sacar adelante procesos con los que sea posible aprovechar al máximo estos elementos.
Si hablamos de las baterías, estas no solo están hechas de litio, también intervienen otra gran cantidad de materiales de difícil extracción como pueden ser el litio, el cobalto o el manganeso. De aquí la necesidad encontrar una manera de obtenerlos después de fusionar, donde un equipo ha encontrado la forma de recuperarlos mediante microbios. “Algunas bacterias pueden sintetizar nanopartículas de metales, por ejemplo. Creemos que lo hacen como un proceso de desintoxicación. Básicamente, se adhieren a los átomos de metal y luego los expulsan en forma de nanopartículas para no ser envenenadas por ellos” confirma la profesora Louise Horsfall, presidenta de biotecnología sostenible en Edimburgo.
Un paso adelante para mejorar la economía y el proceso de fabricación
“Solo hay una cantidad finita de estos metales en la Tierra y ya no podemos permitirnos tirarlos como residuos como lo hacemos ahora.” Esta es otra de las declaraciones de Horsfall, haciendo hincapié en la necesidad de encontrar nuevas formas de reciclar elementos tan importantes como es una batería que pueden ser tanto de productos como ordenadores además de las automóviles. Probablemente veamos en el futuro más opciones para no depender tanto de los nuevos elementos y usar los que ya tenemos.