Para muchos, el Sistema Solar está más que explorado. Al ser el lugar más cercano que tenemos en la galaxia no hay motivo para que haya nada más desconocido que lo que contienen algunos planetas. Sin embargo, nada está más lejos de la realidad y todo es gracias a un cuerpo extraño que se ha formado en el Norte del gigante helado más cercano a nuestra órbita.
Ha sido el Telescopio Espacial James Webb el que ha llevado a cabo esta observación gracias a su sistema de infrarrojos. Todo apunta a que se trata de un fenómeno estacional que seguirá presente hasta el próximo otoño.
Un fenómeno perceptible solo cuando hay mucha luz solar
Una de las El espacio está lleno de fenómenos que solo se entiende bajo algunas circunstancias especiales, algo que también ocurre en nuestro planeta como el arco iris o la aurora boreal, por poner dos ejemplos. Sin embargo, pocos se esperaban que esto también fuera a pasar en el Universo, donde la única fuente de luz son los soles y las estrellas así como las explosiones que estas generan.
Sin embargo, hoy nos toca hablar de un hecho interesantísimo que solo ocurre cuando la luz solar llega al polo norte de Urano.
Seen here by Webb, ice giant Uranus is a dynamic world with rings, moons, storms, extreme seasons, and more. Webb’s sensitivity has even captured the close-in Zeta ring, faint, diffuse, and elusive. https://t.co/T85e7JHwrm pic.twitter.com/R38XPfx7uv
— NASA Webb Telescope (@NASAWebb) December 18, 2023
Resulta que la NASA avistó en el pasado mes de abril gracias al telescopio James Webb un elemento luminiscente en el espacio justo encima de Urano. Lo que llama la atención es que no tenía una forma tradicional de una galaxia o la luminiscencia de una estrella. Era un conjunto de halos que estaban alrededor de una parte más luminosa en su parte central, como una joya espacial.
Y es que se trata, ni más ni menos, que de una especie de tormenta que son muy frecuentes en la atmósfera de Urano. Resulta que cuanto más sol recibe la parte Norte del planeta aparecen estas tormentas brillantes que se proyectan hacia el espacio, dando como resultado la imagen que comparte la agencia.
Unas características muy especiales
Lo más curioso de esta tormenta del plante helado son sus circunstancias. Hemos hablado que esto pasa en otoño, pero lo cierto es que el solsticio de Urano no es el mismo que el de la Tierra ni mucho menos tiene las mismas características. El primer motivo es la órbita de Urano, un planeta que al estar más alejado del Sol tiene una trayectoria más amplia y, por lo tanto, tarda más tiempo en dar una vuelta al Astro Rey (concretamente 84 años terrestres).
Además de la llegada del sol a esta parte, Urano tiene una característica especial y es que gira de forma diferente a la Tierra. En su caso son los polos los que se cambian de sitio, por lo que los cambios de estación son mucho más extremos. Por eso es tan importante captar estos fenómenos para comprender aún más nuestro entorno espacial y dar con más respuestas interesantes para encontrar ese planeta B que tanto se busca como es el caso de las futuras misiones a Marte y también a la Luna.
