Estamos en un momento en el que la IA tiene cada vez más presencia en las vidas de los usuarios. Está llegando a un punto en que los diferentes dispositivos ya disponen con funciones con las que un software de aprendizaje funciona para mejorarlas, pero en otras ocasiones ha causado estragos entre los usuarios. Para intervenir de alguna manera y regularla, la UE ha aprobado su primera ley importante para controlar el uso de la IA.
Desde el 2021 ya se está fraguando una legislación con la que poner límites a esta tecnología, una que ha pasado por varios estadios desde el inaceptable hasta el de peligro en varios niveles.
Un referente en la regulación de la IA
La inteligencia artificial está en un momento de lo más interesante en estos momentos por todo el desarrollo exponencial que está viviendo. Cada vez que alguien hace una pregunta en ChatGPT o en Gemini es un paso más para que el software entienda mejor a las personas y reaccione más rápido y mejor. El problema llega desde otros flancos como ocurre en el caso de los DeepFakes, donde en nuestro país ya tenemos casos de denuncias por el uso indebido de esta tecnología.
Con estos motivos, es innegable que tarde o temprano llegara una nueva regulación con la que poner cercos a la IA. Todo empezó en 2021, cuando ya se tachaba de inaceptable el uso de esta tecnología para ciertos trabajos, aunque todo esto ha desembocado en una reducción del tono frente a la IA además de una necesidad por regularla de alguna manera.
Dicha regulación no es más que una forma de poner en valor el buen uso de este tipo de productos y condenar el malo. Por ejemplo, una de las preocupaciones más grandes por los políticos es la llegada de videos falsos que pueden difundir información que un candidato no ha dicho, aunque a nivel social estos problemas también pueden causar desórdenes sociales de todo tipo.
Europa nombra a sus ‘guardianes’ de la IA
El Viejo Continente ya ha demostrado en otras ocasiones que una legislación bien hecha puede sentar las bases de la regulación de los datos que van y vienen por la Red. Lo hemos visto en otras ocasiones, como es el caso de la RGPD, aunque ahora el asunto sigue siendo aún más serio si cabe por la cantidad de información que mueve la IA.
En este caso, la UE ha tomado en consideración las grandes desarrolladoras del momento para nombrarlas algo así como ‘guardianas’ del buen uso de la IA. Esto las coloca con un grado de responsabilidad alto tanto en el desarrollo de sus programas como en el uso que se le da. Entre este grupo de seis elegidas se encuentran nada menos que los grandes nombres como Microsoft, Google, Amazon, Apple, Meta y ByteDance, que son las firmas más punteras en el ámbito tecnológico y que ya han mostrado sus progresos con el uso de la IA.
Sin embargo, es innegable que esto solo es un acercamiento de algo mucho más grande que veremos en el futuro. Y es que el software de aprendizaje automatizado todavía está dando sus primeros pasos, por lo que en el futuro veremos un claro endurecimiento de las normas conforme aparezcan más problemas y tal vez más graves.