El segmento del sonido es uno de los más interesantes. Cuando parece que la tecnología ha tocado un tope, aparece un dispositivo nuevo dispuesto a romper con todo lo establecido. Pero lo cierto es que hoy te vamos a hablar de una tecnología desconocida para muchos, pero que a día de hoy sigue siendo sorprendente la escuches como la escuches. Hablamos de los auriculares de conducción ósea, los cuales te vamos a explicar el funcionamiento.
A quienes ya tengan uno en su poder saben de qué estamos hablando y la comodidad que aportan teniendo en cuenta que no se introducen en tus oídos como los auriculares convencionales a los que seguramente estás acostumbrado.
Escuchar música sin taparte los oídos
En los tiempos que corren hay quienes piensan que lo que de verdad necesitan cuando escuchan música es que no haya ningún ruido que moleste más allá de lo que supone ponerse los auriculares. Si, estos taponan la entrada del sonido exterior, pero lo cierto es que gracias a la cancelación activa de ruido de algunos aparatos gozarás de una calidad de audio sin precedentes.
Esto está muy bien cuando necesitas concentrarte o no quieres que nadie te moleste en tus sesiones de música sin interrupción, aunque hay personas que son la excepción a esta norma. Estos son los que quieren escuchar música al mismo tiempo que tienen los oídos libres y para todos ellos están los auriculares de conducción ósea. Al no disponer de un sistema de altavoces tradicional, intentan que haya otra forma de llevar el sonido a tu oído.
Sonido convertido en vibración
Como decíamos, los auriculares de conducción ósea son muy diferentes a los tradicionales en muchos aspectos. Uno de ellos es el modo de uso, ya que no tienen un sistema por el que entrar en tus oídos y llevar el sonido a tu oído. En su lugar, los ‘altavoces’ se colocan en la parte externa justo antes de la entrada de la oreja y por delante del trago. Para muchos esto no tiene sentido ninguno, pero es que el funcionamiento de esta característica se vale de la física para funcionar.
Aunque no te lo creas el sonido no se genera a través de una membrana y un conjunto de imanes como los altavoces tradicionales. Su función se basa en la vibración que los dispositivos mandan por los huesos para transferir de manera nítida la música directamente al canal auditivo. Esto deja libre todo el espacio que de otra manera estaría taponado por un pequeño altavoz como ocurre con los auriculares de botón, que aíslan el canal para transferir solo lo que reproducen. Por su lado, los auriculares de conducción ósea permiten que el ruido ambiente entre sin problemas, dando la sensación de que no llevas ningún auricular.
¿Quienes pueden sacar provecho de estos dispositivos?
Como puedes ver, los auriculares de conducción ósea son una opción más que interesante para todos aquellos que no les gusta la sensación de introducir un elemento en sus oídos para escuchar música. De hecho, es una sensación un tanto extraña para todo el que se lo pone por primera vez, pero es cuestión de acostumbrarse. Sin embargo, uno de los segmentos que más provecho le sacarán a esta clase de aparatos son los usuarios más deportistas.
Para la gran mayoría, llevar música en cada entrenamiento es vital para motivarse y seguir concentrado en la tarea, por lo que quieren aislarse del resto de ruidos. Pero para otros es todo lo contrario, ya que llevar los oídos libres también es un método de seguridad. Para los que salen a correr en exterior, supone una mejora sustancial a la hora de estar prevenidos de todo lo que hay a su alrededor. Y es que con los oídos taponados no sabes a ciencia cierta si hay más gente detrás de ti corriendo o si hay un coche acercándose si vas por un tramo de carretera. Lo mismo pasa con los que circulan en bicicleta, quienes también pueden circular con más seguridad por carretera sabiendo cuándo viene un coche.
También los nadadores son capaces de disfrutar del sonido bajo el agua. El sistema de vibraciones evita que se comprometan los elementos electrónicos del dispositivo, ya que no tienen ningún sitio por el que el agua se pueda colar a excepción del puerto de carga si no está tapado. Por este motivo, lo mejor es cerciorarse de que son compatibles echando un vistazo a la web del fabricante o revisando las instrucciones o ficha técnica.
En este grupo también incluimos a todas esas personas que tienen algún problema en el canal auditivo y quieren escuchar música sin molestar a nadie mientras mantienen sus oídos libres. Para ellos es todo un avance, ya que la otra forma que tienen de disfrutar de esto es usando unos altavoces.
Entonces, ¿merece la pena?
Si te preguntas por los precios los hay de todo tipo y prestaciones, aunque los más baratos los puedes encontrar por unos 50 euros en adelante por Internet. Puede que por este rango de precio encuentres algún aparato que simplemente cumpla con las necesidades de contar con un dispositivo que reproduzca música, pero lo cierto es que hay diferentes situaciones que justifican su compra.
Como te decíamos antes, disfrutar de una buena experiencia de audio sin taponar tus oídos es posible con este dispositivo, especialmente si tienes problemas con este oido y son, prácticamente, las dos situaciones en las que merecen la pena. Si no, puede que te interese gastarte más o menos en función de lo que necesites, ya que hay productos en el mercado que ofrecen soluciones incluso más profesionales dependiendo del uso que les des.