El mundo de los videojuegos y las series de televisión no ha estado siempre tan unido como ahora, al revés de lo que ha sucedido con el séptimo arte. Pero, en los últimos años, se han aprovechado todas esas historias cautivadoras que atrapan tanto a jugadores como a espectadores que nos ofrece el vasto ecosistema de los videojuegos.
Atrás quedaron las adaptaciones fallidas y las críticas negativas que han acompañado a muchas de las películas (insistimos, películas) que se han estrenado basadas en juegos. Ahora, series como The Last of Us, Fallout y HALO demuestran que las narrativas complejas y los universos ricos de los videojuegos pueden traducirse con éxito a la pantalla pequeña.
Estas producciones, junto con otras a las que te recomendamos echar un vistazo, reimaginan y expanden los universos que ya conocíamos, ofreciendo nuevas perspectivas y emociones a los fans, al mismo tiempo que atraen a nuevos públicos.
The Last of Us
Basada en el aclamado videojuego del mismo nombre, The Last of Us nos sumerge en un futuro desolado donde la humanidad ha sido diezmada por una infección que convierte a los infectados en una especie de zombies amantes de las setas. Joel, un hombre atormentado por su pasado, es contratado para escoltar a Ellie, una adolescente inmune al virus, a través de un Estados Unidos devastado.
A lo largo de su viaje, Joel y Ellie forjarán un profundo vínculo mientras enfrentan peligros inimaginables, tanto humanos como infectados. La serie captura la esencia del juego original y ya está en producción la segunda temporada.
Fallout
Inspirada en la legendaria franquicia de videojuegos Fallout, la serie nos traslada a un mundo postapocalíptico 200 años después de una guerra nuclear. Lucy, una joven que ha crecido en un refugio subterráneo, se ve obligada a salir a la superficie para encontrar a su padre . En su viaje, se juntará con Maximus y el Ghoul y descubrirá las ruinas de lo que fue una vez Estados Unidos y se verá envuelta en un conflicto entre diferentes facciones que luchan por el control de los recursos escasos.
La serie captura la estética retrofuturista y el humor negro característicos de los juegos y también ha sido aprobada su segunda temporada.
HALO
Basada en la icónica serie de XboX, la serie nos traslada al siglo XXVI, donde la humanidad se encuentra en guerra con una raza alienígena conocida como el Covenant. El Jefe Maestro, un supersoldado espartano, es la última esperanza de la humanidad para detener al Covenant y salvar a la galaxia.
Una serie que, si bien no ha adquirido la fama de las anteriores, rebosa de acción trepidante y unos efectos visuales impresionantes de los juegos, a la vez que explora temas como el heroísmo, el sacrificio y la lucha por la supervivencia frente a un enemigo abrumador.
Castlevania
Inspirada en la clásica saga de videojuegos Castlevania, la serie de Netflix nos adentra en el siglo XV, donde la Transilvania está plagada de criaturas monstruosas creadas por el malvado Drácula. Trevor Belmont, un cazador de vampiros caído en desgracia, se une a Sypha Belnades, una hechicera, y a Alucard, el hijo de Drácula, para formar un improbable equipo y derrotar al conde vampiro.
Sin duda, una de las mejores series de animación que hemos podido disfrutar basadas en los videojuegos.
The Witcher
Basada en la popular serie de videojuegos del mismo nombre, la serie nos traslada al Continente, un mundo de fantasía medieval poblado por humanos, elfos, enanos y otras criaturas fantásticas. Geralt de Rivia, un cazador de monstruos conocido como brujo, viaja por el continente en busca de trabajo y se ve envuelto en una conspiración que podría cambiar el destino del mundo. La serie captura la belleza y el peligro del mundo creado por CD Projekt Red, con una ambientación detallada, personajes memorables y una historia llena de acción y fantasía.
Su cuarta temporada, cambiando a Henry Cavill por Chris Hemsworth, está próxima a ser estrenada.
Arcane
Inspirada en el videojuego League of Legends, Arcane nos lleva a la bulliciosa ciudad de Piltover y su submundo sombrío, Zaun. En este mundo impulsado por la magia tecnológica, dos hermanas, Vi y Powder, se ven separadas por las tensiones entre las dos ciudades. Mientras Vi lucha por sobrevivir en las calles de Zaun, Powder se convierte en Jinx, una brillante pero inestable inventora que desata el caos con sus creaciones.
La serie captura la estética vibrante y estilizada de League of Legends, con una animación impresionante que ha creado escuela.