¿Cuántas veces hemos hablado de cómo sería nuestro primer contacto con extraterrestres? Ha habido múltiples teorías y planteamientos para que, en el caso de que se produzca contacto con vida fuera de la tierra, las principales potencias del mundo tengan un protocolo sobre como actuar, procedimiento que se ha ido perfeccionando desde 1974 con el radiotelescopio Arecibo. 40 años más tarde, un nuevo enfoque matemático propone una manera de empezar a entender los mensajes desde el exterior.
¿Un mensaje en una botella?
El mensaje que lleva el radiotelescopio Arecibo es una representación clara de quiénes somos y de donde venimos, ya que, es un dibujo que representa una doble hélice de ADN, el sistema solar y el propio telescopio. Su mensaje, estaba conformado por 1.679 bits bajo un sistema de representación de ceros y unos. Sin embargo, este mensaje contenía un secreto guardado, ya que si un extraterrestre quiere intentar descifrar el dibujo a partir de la sucesión de 0 y 1, se encontraría un desastre aleatorio.
La imagen descrita estaría conformada por 27 y 73 píxeles respectivamente, los cuales son números primos, dos valores muy interesantes en matemáticas y que otra vida inteligente podría reconocer. Ahora bien, nosotros valoramos la importancia de dicha combinación de números, pero, ¿tendría la misma importancia para ellos?
Estas mismas preguntas se ha planteado Héctor Zenil, un científico e informático de la Universidad de Cambridge y fundador de Oxford Immune Algorithimics y su equipo de trabajo, han desarrollado un nuevo método de descodificación donde, a partir de una cadena de bits, analizan múltiples combinaciones entre el número de dimensiones y el tamaño.

Dicha cadena, se analizaría bajo la posible configuración de dos maneras (puntuación local y global) y una división del mensaje en píxeles y que, a través de procesos algoritmos y matemáticos complejos, generarían valores numéricos de la probabilidad de que la información vaya en el punto adecuado, analizando la probabilidad de que cada punto vaya en el X y en el eje Y. Bajo este método, se obtiene la probabilidad de que cada parche de información se localiza en un punto concreto, y poder así comenzar a descifrar el mensaje.
¿Qué nos aporta este método?
Este nuevo planteamiento podría manejar y solucionar las modificaciones que podría introducirse a medida que un mensaje viaja por el espacio, ya que, en otro análisis del Arecibo, se llegó a la conclusión de que un mensaje muy pequeño como el Arecibo, conformado por 23 píxeles, mostró que el 25 % de los datos se había transformado, pasando de 1 a 0 o viceversa. Por tanto, este científico y su equipo de trabajo, confirman que bajo su planteamiento el problema de transformación de valores de 0 y 1 se soluciona.
Este planteamiento matemático y probabilístico no se queda solo en el terreno de la astronomía, sino que es capaz de ayudar a la medicina, sobre todo, en el campo de señalización intercelular,así como la identificación de componentes importantes en las redes reguladores de genes.
A modo de conclusión, quizás con este nuevo avance en la astronomía habría que plantearse con mayor profundidad que habría que hacer después de que, en el caso, entremos en contacto con inteligencia extraterrestre. ¿Estamos preparados para ello?