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Archax, así es el ‘Transformer’ fabricado en Japón

Un robot que se puede pilotar y transformar.

Llevamos años pendientes de lo que pasa en el mundo de la ciencia y de cómo la robótica. Especialmente en este segundo sector hemos visto grandes avances en el campo doméstico, donde es de lo más habitual a día de hoy ver desde neveras con pantallas hasta aspiradores que recorren tu casa y te quitan el trabajo de barrer e incluso fregar. Pero el término robot se asemeja a tus pensamientos cuando hablamos del robot Archax.

Se trata de un proyecto nacido en Japón en el que se reune toda la esencia de lo visto en las series y películas de animación. Lo mejor de todo es que tiene dos modos de uso, se puede pilotar y, además, lo puedes comprar por un módico precio.

Archax, un robot con dos posiciones de combate

Si eres de los que ha crecido con series de animación Gundam, Mazinger Z o Evangelion, por poner algunos ejemplos, sabrás lo que es un Mecha, o un robot. Todo cambia si hablamos de lo que son los Transformers, robots capaces de transformarse en vehículos cuando quieran o necesiten.

Te damos todas estas referencias con un propósito: presentarte al Archax de Tsubame Industries. Se trata de un hito de la tecnología, una en la que la inteligencia artificial o los drones son los campos más seguidos. En este caso se alza un robot de enormes dimensiones con sus 4,5 metros de altura y un peso de 3,5 toneladas de hierro, cables y chips distribuidos en un sistema tipo centauro.

搭乗型ロボット アーカックス 第1弾PV|ツバメインダストリ搭乗型ロボット アーカックス 第1弾PV|ツバメインダストリ

Dicho de otro modo, su construcción se basa en cuatro patas de apoyo que soportan un torso robotizado. Las patas están articuladas, pero su forma de moverse es gracias a un sistema de cuatro ruedas. Esto tiene un porqué, pero antes debemos hablar del tren superior en donde se aloja una cabina para el piloto que recibe en un sistema de cuatro monitores la señal de las cámaras que hay en el exterior.

Desde ese habitáculo se pueden controlar todos los movimientos del robot, desde los movimientos de las manos hasta la posición del robot. Funciona con baterías, por lo que el nivel de estas vendrá indicado en la interfaz interna para dar ese dato importante al piloto. Otra cosa interesante es que dispone de dos ‘posturas’. Lo cierto es que no hay mucha diferencia a la vista entre el modo vehículo y el modo robot, más allá de que la distancia entre las piernas delanteras y las traseras es más amplia para una mejor aerodinámica y tener más velocidad.

Puedes comprarlo por una cuantiosa suma

No cabe duda de que controlar el Archax es un lujo que a los amantes de los robots les gustaría tener en algún momento. Y para esto tenemos una buena noticia y una mala. Empezamos por las buenas y es que el creador de este robot, el joven Ryo Yoshida de 25 años, pone este aparato en venta. Y es aquí donde viene la mala noticia y es que el precio llega a la friolera cuantía de tres millones de dólares.

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